Un privilegio el de Marcos Mata, que no todos se lo pueden dar: jugar un mundial. El marplatense debutó este lunes en el triunfo de Argentina sobre Angola por 91 a 70. El jugador de Peñarol ya entró en la historia del deporte de la ciudad.
Pero no llegó de casualidad a este presente. Con esfuerzo y dedicación se forjó su propio destino. En el Milrayitas culminó una temporada magnifica ganando casi todos los títulos que jugó y siendo fundamental en la final con Atenas de Córdoba, lo que sería el segundo título de la Liga Nacional de Básquet para uno de los clubes de “La Feliz”.
Pero a lo que se refiere en materia de juego, la Selección que dirige Sergio Hernández fue de menor a mayor en el encuentro ante el campeón de Africa. Luego de transitar un partido parejo en los primeros tres cuartos, en el último lo liquidó. Luís Scola estuvo intratable (32 puntos), Carlos Delfino aportó lo suyo (22), al igual que Leonardo Gutiérrez (6) y el ex Quilmes Luís Cequeira (6).
Lo cierto es que Marcos Mata debutó y tuvo sus minutos de sueño en el triunfo Albiceleste (alrededor de seis). Con el pase a octavos concretado, seguramente sumará más tiempo en cancha en las dos fechas que restan disputar de la primera fase. Ahora quiere ser más MATAdor que nunca.
Por Maximiliano Ibáñez
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