La crueldad en la costa atlántica no cesa. Los cuerpos de una tortuga marina decapitada y un delfín fueron encontrados en la playa de Mar Azul, ubicada a 100 kilómetros de la localidad de Santa Teresita, donde un grupo de turistas sacó del agua a una cría de franciscana para sacarse fotos y la mató.
Las imágenes que circulan en la web muestran el tamaño de los animales y el estado en el que se encontraban sus cuerpos al momento del hallazgo. Todavía no se conocen los motivos por los que terminaron en la playa de ese balneario de la costa y quienes son los responsables de semejante salvajismo.
El nuevo hallazgo se convirtió en un evento todavía más macabro que el anterior debido a las condiciones en las que se encontraban ambos cadáveres. La tortuga tenía una soga atada alrededor de su cuerpo para que no se moviera y de esa manera poder decapitarla.