Nuevamente, pero por segunda vez en el año, se representa el viejo sainete lugareño “El aumento del boleto del colectivo”, donde cada uno sabe su papel, pero si bien cada actor busca lucirse mejor en el escenario, nadie se sale del libreto.
Ya en junio del corriente año el gerente del Libertador UTE, Juan Bilbao explicitó públicamente la intención de solicitar el aumento, ¿esta es la mala noticia?, en realidad la mala noticia es que esta situación se va a extender en el tiempo, y va a ser así porque así está estructurado y los resultados están puestos por encima de las declaraciones. A tal punto es así, que ningún funcionario u opositor tiene números propios, porque en este armado los únicos que tienen los elementos para el cálculo son los empresarios del Transporte.
El verdadero debate no es el aumento del boleto, la cuestión a discutir es si la Municipalidad controla el servicio que da en concesión o lo controlan los concesionarios.
Sin duda el boleto tiene un costo, y la pregunta sin respuesta es si la rentabilidad empresarial es exagerada ante la situación del usuario o es a costa de la calidad del servicio o ambos casos. Pero lejos de discutir números, si es que los números se pueden discutir, se argumentan costos al menudeo o se recurre a ejemplos que en La Plata
sale tanto, que en Córdoba cuesta más, cuanto sale en Tandil, etc.
Desde el vamos, en una ciudad que se perfila como Mega Ciudad, las argumentaciones esgrimidas son poco serias, porque si fuera por ejemplos también se podría poner el sistema de transporte de algunas ciudades de Brasil que con los mismos elementos y costos del boleto similares a los vigentes en nuestra ciudad, brindan un servicio de RED
INTEGRADA CON TRANSBORDO de línea en línea y con gratuidad a estudiantes y jubilados.
Desde el Socialismo Auténtico, venimos sosteniendo que el problema del transporte radica en que el servicio público no está controlado por la Municipalidad, está controlado por el sector empresario por lo que los resultados siempre estarán favoreciendo su rentabilidad y no las necesidades del usuario, ni las prioridades económicas – estratégicas de la ciudad. De hecho la distribución de los fondos es a sola firma del Gerente de la UTE, que encuentra a la Municipalidad con la actitud pasiva de notificado.
En esta discusión sin sorpresas, seguimos planteando la necesidad de que la Municipalidad recupere el control administrativo del servicio, de la necesidad de implementar la línea testigo y que esta línea testigo de un servicio de Red Integrada con un costo plano para todo el Partido de Gral. Pueyrredón con sistema de transbordo. Esta ha sido la herramienta que en muchas ciudades sudamericanas abrió la puerta al desarrollo pleno, ayudó a resolver los problemas del tránsito, contribuyó al ahorro de combustible y al cuidado del medio ambiente.
La cuestión del transporte público, es una de las áreas en las que se puede afirmar que todo lo que está ya no sirve, si es que alguna vez sirvió, que Mar del Plata- Batán no resiste más estos feudos empresariales que la postergan y le quitan fuerzas a su potencialidad.
La Red Integrada de Transporte más que una propuesta es una necesidad, por ser un esquema que prioriza los intereses económicos – estratégicos de la ciudad, da una solución eficaz y comprobada para resolver los problemas del tránsito, permite un desarrollo armónico en todo el territorio, abriría las puertas a los pequeños ahorristas para la prestación del servicio y daría transparencia en sus costos.
Pablo Aceto
Pre candidato a Intendente de Mar del Plata – Batán
Partido Socialista Auténtico en Frente Amplio UNEN