Decir que la Nación está atravesando horas aciagas ya constituye una perogrullada y nos lleva a pensar que todos los diagnósticos nos conducen a la misma aseveración… la `Patria se encuentra en terapia intensiva´. Aunque también resulta errado pensar que está en terapia ya que para ello se necesita un tratamiento de shock y la decisión de todas las fuerzas socio-político-económicas para intentar salvarla.
A menos de 40 días de las PASO el desorden institucional es mayúsculo y este pandemonium le resulta afín a todos los que están tratando de evitar lo que en cualquier país serio sería algo absolutamente natural…LA CÁRCEL.
Ver en las pantallas de TV el bochornoso espectáculo que están ofreciendo los legisladores kirchneristas que, en su afán de seguir sosteniendo los fueros de un delincuente, acuden a cualquier artilugio para salvarlo del desafuero. Me estoy refiriendo al gangster Julio De Vido, quien ya debería haber pisado con su rostro cargado de cinismo, patrulleros, camiones celulares, comisarías y cuanto estrado judicial esté habilitado para alojarlo en el destino que le corresponde.
Pero no… todo el andamiaje político-judicial está preparado para lo contrario. Lograr 172 votos, es decir los 2/3 de los diputados, representa una tarea titánica, lo cual demuestra bien a las claras que dicho recinto legislativo está repleto de delincuentes como De Vido.
La jefa de la banda pasea su soberbia, odio y resentimiento en cuanto medio de comunicación esté a su alcance y nuestro Presidente, con llamativa tibieza, calla con una prudencia que semeja más a falta de decisión que a otra cosa.
Ayer, en el recinto de Diputados, los legisladores de Cambiemos hubiesen necesitado de una sola frase y, llegado el momento someterse a una cuestión de privilegio y decir: “Legisladores kirchneristas y afines…TODOS USTEDES SON UNA MANGA DE HIJOS DE PUTA”.
Alberto Ercilio Valente