Niebla y gaviotas en la previa a la asunción
El Congreso de Chile, ubicado en la portuaria Valparaíso, recibió esta mañana a los invitados a la ceremonia de cambio de mando presidencial con una bruma marina y gaviotas. Pese a los 20 grados previstos por el servicio meteorológico, el frío sorprendió a los asistentes, muchos de los cuales no habían llevado abrigo.
Selfies y abrazos en la previa a la ceremonia
Antes de dar comienzo a la ceremonia, los invitados aprovecharon para saludarse y muchos de ellos, hacerse selfies. Tal fue el caso de la expresidenta brasileña Dilma Roussef, que se sacó una selfie con el presidente argentino, Alberto Fernández; su par de Paraguay, Mario Abdo Benitez; y su mujer. También se acercaron para abrazar, charlar y sacarse una selfie con Roussef la flamante vocera de Gobierno de Chile, Camila Vallejos, y la ministra de la Mujer, Antonia Orellana. Ambas funcionarias saludaron también a Fernández, con el que charlaron durante unos minutos.
Símbolos feministas, plurinacionales y contra la dictadura
La Sala de Honor del Congreso chileno estuvo plagada de símbolos durante toda la ceremonia. Había varios invitados con pañuelos verdes -a favor del aborto legal- y violetas -contra la violencia de género-. Violeta también fue el color que eligieron para vestirse la flamante la ministra de Interior, Izkia Siches, la canciller, Antonia Urrejola, y la vocera de Gobierno, Camila Vallejos. En tanto, la ministra de la Mujer eligió un rosa pálido.
En la sala había también pancartas con el lema “Nunca Más” y “¿Dónde están?”, en referencia a los desaparecidos de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y miembros de todos los pueblos originarios chilenos con sus respectivas vestimentas.
Gritos, emoción y ovación durante la toma de posesión
“Viva el pueblo mapuche” y “Verdad, justicia y memoria por las víctimas de la dictadura” fueron los gritos que se escucharon antes de que Boric firmara el acta de cambio de mando presidencial. La emoción se sentía en la sala tras la asunción oficial del nuevo presidente y Orellana no pudo contener las lágrimas, mientras una sala pie lo ovacionaba.
También se oyeron gritos cuando el mandatario saliente, el conservador Sebastián Piñera, abandonó el salón. Miembros del pueblo mapuche gritaron: “Nazi”, “Libertad para los presos políticos mapuches” y “Queremos libertad en la Araucania”. Boric, en tanto, permaneció serio.
Una carabinera conduce el auto oficial y Boric saluda a simpatizantes
Por primera vez, el auto presidencial, un Ford Galaxy negro descapotable, fue manejado por una mujer carabinera.
A 200 metros del Congreso, Boric cambió de vehículo para ir al almuerzo que ofreció ante jefes de Estado en el Palacio Cerro Castillo, pero antes del cambio rompió el protocolo para saludar a vecinos de Valparaíso.
Dos fotos oficiales en Cerro Castillo
Los jefes de Estado y Gobierno invitados al almuerzo dado por Boric en la residencia de verano presidencial, ubicada frente al Pacífico en Viña del Mar, se realizaron una foto oficial, marcada por la presencia exclusiva de hombres. El nuevo Gobierno chileno, que se autodenomina “feminista”, hizo también una segunda foto de familia, esta vez, con la presencia de las primeras damas, un gesto inusual que no pasó desapercibido.
Boric pregunta a Fernández por su pareja
Tras la foto oficial en Cerro Castillo, Boric le preguntó a su homólogo argentino por la ausencia de su pareja, Fabiola Yáñez, y Fernández le contó que estaba embarazada de ocho meses, gesticulando una gran panza con sus manos.