Continúa la conmoción por la noticia sobre las gemelas marplatenses de 12 años que se arrojaron de un tercer piso en Barcelona porque sufrían bullying. En las últimas horas se dio a conocer un extracto de las cartas de las menores sobre porqué habrían tomado la drástica decisión.
Según el diario El País las adolescentes escribieron que sufrían acoso escolar por su acento argentino pero sobre todo quién más padecía el bullying era Alana por su identidad sexual: “Me siento incomprendido”. Se había cortado el pelo y quería que lo llamen Iván.
Con respecto a Leila, la menor que sobrevivió, su carta expresa que “acompañaría a su hermana y que actuaba en solidaridad”.
“Estoy cansada de que me hagan bullying en la escuela, no lo soporto. Yo quiero ser feliz, pero evidentemente yo esto lo voy a sufrir el resto de mi vida y tomé la decisión de no seguir”, habría escrito Alana.
Mientras que Leila expresó: “Disculpas a todos, ustedes saben de lo que yo amo a mi hermana, yo vi todo el bullying que sufre ella, voy a hacer lo que ella decida. La voy a acompañar a donde ella quiere”.
Con el paso de los días se obtiene más información sobre el caso y a pesar de las acusaciones entre la escuela y los familiares todavía la causa sigue en investigación.
El abuelo de las gemelas, Gustavo Lima, habló con algunos medios en la mañana del viernes desde el Aeropuerto de Ezeiza donde despegará el avión que lo llevará rumbo a España para reencontrarse con su familia.
Allí Lima confirmó que a pesar de las graves heridas que tiene Leila y de su estado crítico “tuvo una leve mejoría” y está la posibilidad de que durante la jornada puedan despertarla. La menor tiene sus brazos quebrados, su mandíbula, una parte de su cabeza, y sus órganos dañados.
“No la podían mover el día anterior porque tenían miedo, tenía muy tomado el pulmón. Ayer tuvo una mejoría y hoy iban a tratar de despertarla para poder hacer las curaciones. Tiene la mandíbula quebrada y es lo primero que quieren curar”, explicó.
Asimismo, Gustavo manifestó dolor por el sufrimiento de su nieta Alana por la decisión que tomó tras sufrir acoso escolar que se profundizó cuando decidió modificar su identidad sexual: “Ahí se desató todo más, porque se cortó el pelo y se vistió como varón. Se ve que es un delito no solo allá en España, en todos lados”.
Por el momento continúan las investigaciones pertinentes mientras siguen las acusaciones entre los familiares y la institución educativa Llobregat de Sallet.
El primer caso sostiene que tuvieron una charla con las autoridades por los reiterados episodios de acoso pero que no fueron escuchados, mientras que la escuela señaló que “no tienen un expediente abierto” con relación al tema pero que sí ambas eran asistidas por el gabinete psicológico.
Fuente: Noticias Argentinas