Este evento marca un hito en la lucha contra la explotación sexual en la ciudad, transformando un lugar de dolor y sufrimiento en un espacio de esperanza y justicia para las víctimas.
Juan Martín Mena destacó el trabajo incansable de la Mesa Interinstitucional contra la Trata de Personas de Mar del Plata, que logró no solo desarticular la red de trata que operaba en el lugar, sino también avanzar en la creación de un espacio dedicado a la memoria y la lucha contra este delito.
Lucía Muraca, integrante de la Mesa, expresó su emoción ante este logro, calificándolo como el resultado de años de lucha y compromiso para construir el primer centro de memoria y lucha contra la trata en el país.
El exdiputado provincial Pablo Farías, uno de los impulsores de la expropiación junto a Fernanda Raverta y Alejandra Martínez, enfatizó la importancia de garantizar el presupuesto necesario para convertir este espacio en un verdadero centro de prevención y asistencia a las víctimas.
Por su parte, Fernanda Raverta resaltó el rol del Estado en la defensa de las causas justas, destacando la voluntad política de hacer propias las demandas de la sociedad civil.
“La Casita Azul” fue cerrada en 2010 y su expropiación fue sancionada por la Legislatura bonaerense en 2014, con el objetivo de destinar el espacio al funcionamiento de un Centro Marplatense de la Memoria y Lucha contra el Delito de Trata de Personas.