“Cosas veredes, Chancho”. Daniel Osvaldo Scioli, no se caracteriza por tener “grandes luces”, por ello, uno podría imaginar que, las reuniones del gobernador con sus ministros y colaboradores inmediatos, se deben realizar en “un cuarto oscuro”.
Sólo hay que analizar sus últimas medidas para confirmar que sería mejor asesorado por, Macri y Massa, que tampoco son estadistas, pero que parecen más astutos. O que tienen mejores frenos reflexivos en su entorno.
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¿A quién se le puede ocurrir, en vísperas de elecciones, aumentar los peajes? ¿O incrementar la ya cara revisación vehicular? (No escapa a nuestros conocimientos que, “cuando menguan los fondos hay que acudir a las cajas seguras”.
¿No hubo ningún colaborador que le advirtiera que era un disparate viajar al exterior en medio de las inundaciones en la Provincia?
¿O que lo frenara, sugiriéndole cambiar el argumento de que estaba estresado por las corridas pre electorales? Si no está templado para bancarse ese esfuerzo, ¿quién podría elegirlo como navegante de tormentas?
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Y decimos todo esto por el último disparate estratégico que acaba de cometer: Mar del Plata, el distrito que más aportes económicos recibió en todo el territorio bonaerense durante su mandato, le pagó con una patada en el trasero, mostrándole la cara de la derrota y encumbrando a su principal contrincante.
¿Cuál fue el motivo?
¿Reprobación a Gustavo Pulti?
¿Reacción airada contra la multimedia periodística de “Don Florencio”, que endiosó a Carlos Arroyo, ninguneó a Vilma Baragiola y también quiso imponer los resultados electorales?
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El último disparate estratégico de Scioli, sus asesores, y el diario La Capital se acaba de producir…
Es “vox populi” que el decano de la prensa marplatense, publicó notas y más notas, la mayoría de los días, tratando de inflar la figura y la gestión de Rodolfo Manino Iriart; tanto que, en las ediciones del 17 y 18 del corriente, le dio más espacio y mayores titulares al ex secretario de Seguridad Municipal, que al Libertador José de San Martín, pese que se recordaba un nuevo aniversario de su muerte.
“Manino”, con ese apoyo “periodístico”, saltó de repositor a Paladín de la Seguridad ciudadana de Mar del Plata.
Lope de Vega hace muchísimos años dijo que “a la gente, si le dan granos, come grano y si le dan pasto, come pasto”.
Nosotros descreemos de la capacidad policíaca de este muchacho, que apareció en fotografías tomadas de noche y de día, en cuanto operativo policial se realizara: desde el desmantelamiento de una banda de asaltantes a la captura de un ladronzuelo de gallinas que portaba una honda o “gomera”.
Pero, ¿qué dirá la gente si tuviéramos la desgracia de que se cometiera un resonante caso policial, con tiroteos, víctimas fatales y grandes escándalos?
El común reclamaría porque el genial “Manino”, que dejó de manejar la policía para convertirse en encargado de la campaña pre electoral del gobernador…
Habría que recordarle al flamante “licenciado en comercialización”, que hubo un general que se llamó Juan Domingo Perón que aconsejaba “no cambiar de caballo a mitad del río”.
Como colofón y parafraseando al “Manco de Lepanto”, bien podríamos decir: “Cosas veredes, Chancho”.
F.A.I.
