En medio de la alarma mundial por el surgimiento de la variante Ómicron y las nuevas restricciones aplicadas por el gobierno a los viajeros que provengan desde África, la cartera de Salud quedó en medio de un escándalo por el ingreso de un buque desde ese continente al que habilitaron por un insólito error.
El episodio ocurrió el fin de semana, después de que la ministra Carla Vizzotti anunciara la cuarentena obligatoria para los que ingresen desde África. Esa medida se publicó ayer en el Boletín Oficial pero en los hechos ya había un control más fuerte sobre los ingresos.
Según reveló Infobae, la Dirección de Sanidad de Fronteras permitió el ingreso sin controles del buque crucero MS Hamburg, de bandera de Bahamas, que provenía de Cabo Verde.
La razón por la que se permitió el ingreso sin controles es insólita: aparentemente los funcionarios a cargo del control creyeron que Cabo Verde pertenece a Asia y cuando percataron que es parte de África ya era tarde.
Para que la tripulación de un buque pueda descender, la Dirección de Sanidad de Fronteras debe otorgarle la “libre plática”, una autorización que se da luego de que se informa cuáles fueron los puertos en donde estuvo amarrado el buque, entre otros ítems. La autoridad sanitaria permitió el ingreso sin objeciones de unas 300 personas.
Testigos del episodio contaron al citado medio que hubo una acalorada discusión entre funcionarios acerca del continente al que pertenece el puerto de Praia, en Cabo Verde. “Boluda, este barco viene de Cabo Verde, ¿eso no es en África?”, es el diálogo entre funcionarias que reveló Infobae. Una vez descubierto el fallo, varias horas después, le retiraron la “libre plática” y pasajeros y tripulantes quedaron confinados. Además, efectivos de la Prefectura que realizaron una inspección de rutina en el barco también tuvieron que ser aislados.
El problema es que algunos de los pasajeros y tripulantes ya se habían ido y tuvieron que salir a buscarlos de manera desesperada. Uno de los pasajeros permaneció aislado junto a su familia sin bajar del barco porque había dado positivo de Covid.
En medio de la polémica, desde el Ministerio del Interior salieron a aclarar que Sanidad de Fronteras depende del Ministerio de Salud y no de Migraciones.
Horas después de desatado el escándalo, Vizzotti salió a dar explicaciones por Twitter. “La información difundida sobre el crucero ‘Hamburg’ es falsa”, dijo la ministra, que explicó que “el buque dio aviso de un caso positivo, se programó un operativo y se realizaron más de 300 PCR en 24 horas”. “Todas fueron negativas incluyendo la del caso, quien continúa aislado junto a sus contactos estrechos”, dijo.
La ministra también se tomó la molestia de dar consejos periodísticos. “Nadie nos consultó antes de la publicación de la nota, lo cual hubiese evitado que se difundiera información incorrecta. No nos vamos a cansar de recomendar que chequeen con fuentes oficiales y confiables, y de esta forma aportar calma en esta situación tan particular”, tuiteó.