Una vez más la JUREC Mar del Plata, junto con la recientemente formada cámara patronal ACIDEPBA, demostraron su insensibilidad para con los docentes de las escuelas a las que representan en su jurisdicción.
Ante el legítimo reclamo del día 29 de septiembre pasado en solidaridad con el compañero Profesor Ricardo Fusco de la escuela Secundaria N° 11 de la ciudad de Pergamino, que fue agredido física y moralmente en su lugar de trabajo, dichas cámaras respondieron descontando el día de paro.
Este descuento es decisión exclusiva de los empleadores señalados, ya que el estado provincial y municipal no ha efectuado descuento alguno. Tampoco lo han hecho distintas jurisdicciones de la JUREC en la provincia.
De igual modo debemos resaltar el valor de algunos colegios confesionales y no confesionales que aún a costa de “sacar los pies del plato”, entienden y acompañan a sus trabajadores, no solo con palabras sino con hechos.
El derecho de huelga es un derecho constitucional que los docentes privados estamos privados de ejercerlo porque somos castigados con descuentos en el salario. Vale recordar que el salario es de carácter alimentario y todo descuento en él es un condicionante a la hora de acompañar los reclamos, los empleadores lo saben y actúan en consecuencia
Este derecho se hace trizas frente a la realidad impuesta por la asimetría de poder que existe entre un trabajador y su empleador. Es esta y no otra la causa principal por la que podemos decir que no existe una verdadera libertad de expresión y de acción en las escuelas, y que la violencia laboral se hace siempre presente cuando nos enfrentamos a situaciones como éstas. Así no se construye la paz social. Así no se puede hablar de construir los consensos necesarios entre los distintos sectores de nuestra sociedad”.
Desde SADOP, repudiamos y seguiremos denunciando estos actos de injusticia, y realizando las acciones gremiales, administrativas y judiciales correspondientes.
