El radicalismo bonaerense formalizó su decisión de avanzar en la conformación de un frente de centroizquierda en la Provincia y, al mismo tiempo, cerró cualquier posibilidad de ir hacia un entendimiento con Mauricio Macri, tal como promueven algunos sectores como el liderado por el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
De esta forma, la UCR le abrió la puerta a una alianza con el Frente Amplio Progresista, el sector orientado por Hermes Binner y cuya mayor exponente en la Provincia es Margarita Stolbizer.
Esta decisión fue adoptada por la Convención del radicalismo provincial que se reunió ayer en Olavarría, donde se escucharon además fuertes cuestionamientos a los gobiernos nacional y bonaerense y se sostuvo que el perfil del partido debe ser el de “una fuerza auténticamente progresista, republicana y socialdemócrata”.
En términos de la política interna partidaria, el resultado de la Convención blanqueó la ruptura del acuerdo que hace algún tiempo habían anudado el Morena de Ricardo Alfonsín y el sector de Posse quien, como anticipara este diario, fue la Justicia en procura de evitar que se reuniera el órgano encargado de decidir la política de alianzas.
DENUNCIA
Posse hizo una presentación en la Justicia Federal platense para denunciar que muchos de los convencionales habían sido electo con los padrones objetados por los propios tribunales federales hacia mediados del año pasado. Pero ante el revés judicial, la Convención logró ayer reunir quórum con el concurso de alfonsinistas, los sectores de Leopoldo Moreau y Federico Storani que junto a otros grupos internos en el que confluyen intendentes y legisladores, conformaron hace algunos meses el grupo denominado Nuevos Aires.
En ese contexto, y luego de varias negociaciones, finalmente se acordó que el alfonsinista y ex intendente de Necochea Daniel Molina, fuera ungido como titular de la Convención, cuerpo en el cual habrá 5 representantes de Nuevos Aires y 4 del Morena. En tanto, otro organismo clave como la Junta Electoral partidaria, será presidida por Carlos Sánchez e integrada por tres alfonsinistas y dos miembros de Nuevos Aires.
La Convención resolvió instruir expresamente al órgano ejecutivo del partido para que se inicien gestiones para la conformación de frente con fuerzas política e ideológicamente afines.
CRITICAS
En el documento aprobado ayer, la Convención sostuvo con un tono crítico al gobierno nacional que, “pese a un crecimiento económico permanente, sostenido en buena medida por condiciones de un mundo extraordinariamente favorable”, los “problemas estructurales no se han resuelto y en algunos casos las condiciones de retroceso y deterioro se profundizaron”.
Y acotó: “La pobreza sigue rompiendo el tejido social y lastimando derechos básicos como la educación, la salud y el transporte que son negados a millones de argentinos”.
Además, la UCR bonaerense alertó que impera en el país “un clima beligerante y de imposición de verdades únicas, que se confrontan sin posibilidades de conciliación”. Y añadió que “pecaríamos de ingenuos al suponer que el proyecto reeleccionista se halla archivado. Estamos convencidos de que el gobierno insistirá con su plan central, por una u otra vía intentará facilitar un tercer mandato de Cristina Kirchner”.
Por otra parte, los radicales cargaron con dureza al gobierno bonaerense de Daniel Scioli. “Fue y es absolutamente funcional al gobierno nacional, se preocupa por los títulos y fotos de los medios de comunicación pero no por remediar los graves problemas que sufrimos”.
En tanto, en clara referencia a Mauricio Macri y por elevación a Posse, la Convención de la UCR sostuvo que “el camino es la construcción de un espacio auténticamente progresista, que constituya una verdadera alternativa coherente, capaz de reemplazar el actual modelo desde una visión de centroizquierda, que avente las chances de una nueva experiencia neoliberal noventista”.