Este sábado, el Teatro Colón de nuestra ciudad, se vistió una vez más de música. No sabemos si por falta de difusión adecuada o por lo insólito de la hora, a las 11 de la mañana, la falta de público en cantidad conforme al espectáculo que se ofrecía fue notoria. De todas maneras, entre los pocos presentes, los aplausos se multiplicaron y cubrieron las ausencias de los que se lo perdieron.
Nuestra Orquesta Sinfónica Municipal se presentó en esta ocasión con uno de los habituales directores invitados, el maestro Guillermo Becerra. Dentro del programa, una obra magnífica de quien fuera uno de los máximos violinista de nuestro país, Antonio Agri. Los tangueros saben exactamente de su virtuosismo, que mostraba entre otros con nuestro Astor Piazzolla, con quien sólo tocaban los mejores.
Pero, asimismo, Agri, como compositor escribió, entre otras, la obra “S.P. de nada”. Aquí la misma se presentó, actuando como violinista invitado, su hijo Pablo Agri, a quien se lo notó emocionado al agradecer el apoyo musical de la sinfónica marplatense y la aceptación del público, al cual luego le regaló un solo del tango “Nostalgias”. La obra del padre tiene una exquisita musicalidad, cambio de ritmos y una visita por el tango, donde se nota el amor de don Antonio por esta música. Pero lo que más conmueve es el sentimiento que transmite en sus notas musicales, las que hizo vibrar perfectamente ese hijo también excelso violinista.
El concierto se completó con obras de von Weber, Tchaikowsky y Rimsky Korsakov. Fue así una jornada espectacular también para Guillermo Becerra. Por la tarde el mismo sábado se hacía presente en la Plaza del Agua, dirigiendo la Banda Municipal de Música, en un concierto anticipatorio del Festival de Cine, ya que abarcaba obras de famosas películas, algo que muy bien realiza esa formación.
Becerra dijo que hace 30 años que está en Mar del Plata y nos señaló que este 2014 ha sido fenomenal por las diversas propuestas a las que ha respondido presentándose en varios escenarios de la Argentina, dirigiendo entre otras, a la Sinfónica Nacional, actuando asimismo junto a Bruno Gelber. Pero volviendo a nuestros espacios musicales, por historia y presente, Guillermo Becerra, por talento, capacidad y dedicación, se ha convertido en uno de los referentes obligados de la ciudad de Mar del Plata, en cuanto a música se refiere.
En síntesis, una fiesta para pocos, en un concierto a toda orquesta.
MIGUEL TOSCANO
Debería haber más difusión. Yo, que estudio en el Conservatorio no me entero de nada…