De la galera y como gobierna por decreto por la mayoría automática en el HCD, sacó una moratoria para las deudas de tasas y derechos municipales. En 2007, en ese momento el flamante intendente Gustavo Pulti aseguró sobre la moratoria abierta (que dejó Daniel Katz) y vencía el 31 de enero de 2008, que una vez cerrada la misma no iba a haber más oportunidades. Una vez más se premia a los deudores (por la necesidad de caja) y se toma por bobo a quien ha cumplido religiosamente. Para Pulti concejal, fue un credo que recitó durante 18 años, ahora se ha convertido en el más cerril de los pecadores.
Lo cierto es que con la decisión tomada, se acaba de consagrar como en moratoria permanente, aunque cambie los títulos. Pero resulta lógico si se aplica un mínimo de razonabilidad y sentido común. La caída del poder adquisitivo y la actividad comercial en general, tiene sus consecuencias y derivaciones. Hoy la gente ya financia el gasto en alimentación, con tarjeta de crédito.
A partir de ahí, se opta por pagar las facturas de servicio (luz, gas y teléfono) y deja de estar al día en primer término con las tasas municipales (lo primero que no se paga). Con la merma de la cobrabilidad, también cae el nivel de recaudación y la inflación impacta además en los gastos municipales, contemplados en el presupuesto con los índices del INDEK. Lo más grave es que se desconoce la verdadera situación económica – financiera de la Municipalidad. Para poner en línea y ordenar la línea de acción, por un lado se aplaude el modelo nacional y popular, por el otro lado, sigue metiendo la mano en el bolsillo de los contribuyentes. Ya hace rato que nada se sabe sobre esos sorteos a los contribuyentes cumplidores. La mentira hace estragos en la diferencia entre la realidad y el relato.
Este jubileo de la moratoria, tiene que ver con las necesidades de caja para el pago de haberes de noviembre, y próximamente del aguinaldo, es indisimulable, lo que ocurre es que el secretario de Hacienda Santiago Fernández (empleado de Pulti, con sueldo público) que se pone el antifaz de funcionario técnico, habla menos que Hernán Lorenzino, el ministro de Economía de CFK.
No sería extraño que esta decisión, esté directamente relacionada con la elevación esta semana del presupuesto 2013, que contempla endeudamiento generalizado, aumento de tasas, un índice de inflación que no responde a la realidad y deberá contemplar un aumento salarial a los empleados municipales, que no estará por debajo del 25 %, para compensar la pérdida que este año acompañó el sindicato que está a cargo de Antonio Gilardi, alineado con el poder central, o sea Balcarce 50.
Menor cobrabilidad, disminución en la copartipación provincial y nacional y aumento en los gastos de funcionamiento, constituyen un combo explosivo, precisamente para que nos despertemos por ejemplo, con una moratoria que sale en gallos y medianoche, sin tratamiento en el Concejo Deliberante. El gasto y el ejecutado municipal del presente ejercicio, es mantenido bajo siete llaves.
Tiene otra doble intencionalidad, librar de la pesadilla del estricto cumplimiento del Código de Publicidad a los comerciantes, que sufren caída en sus ventas, aumento de costos y como “peludo de regalo” un gasto absolutamente imprevisto como desmontar marquesinas, reparar los frentes y finalmente pagar según la nueva norma, un factor que muy bien (por ahora) esconde el gobierno de Gustavo Pulti. También contó con el baboso aporte de Raúl “Rulo” Lamacchia, funcionario público e integrante de grupos corporativos desde la dictadura militar, de la mano del Proceso de Reorganización Nacional, hoy aliado de Pulti. También se imaginó un recupero de deuda y de una cartera morosa en derechos de publicidad, algo que ha sido incobrable históricamente.
Importante. Será generosa la pauta oficial de los anuncios publicitarios de la moratoria, en las cuales se prenderán el multimedios, los canales de aire, etc. Nadie debe ser sorprendido, sobre los efectos que inevitablemente sobrevendrán. Por este trabajo político sucio hay gente que se lleva mucho dinero público. Existen las complicidades. Pulti dice que su gobierno es transparente, decente y honesto. No hace ningún esfuerzo por demostrarlo, ya hay hechos y evidencias.
Jorge Elías Gómez