La razón fundamental es el manejo que se hace de los pagos, en un momento donde precisamente no es dinero lo que sobra. El trascendido sobre el cual se ha pedido expresa reserva, debido a la seriedad del mismo, se está concentrando en la acumulación de falta de pago a proveedores de dos entes descentralizados y dos Secretarías, una de las cuales tiene aprobado un fondo afectado, que sólo ha ejecutado en un bajo porcentaje de su recaudación.
El descontento también ha partido desde el propio Concejo Deliberante, donde no se puede continuar disimulando demoras en las remesas comprometidas desde la Secretaría de Hacienda, entre ellas la antigüedad en los haberes de los concejales, que ha tomando estado público.
La situación ha llegado a tal punto, que una íntima funcionaria del intendente Pulti, en más de una ocasión ha debido intervenir personalmente para liberar pagos, lo cual no deja bien parada a la administración pública municipal, hacia quienes observan cómo es el mecanismo de cobranza.
El proveedor a quien se le adjudica el rumor, es habitual contratista del GCBA y grandes municipios del GBA y provincias, ha sufrido demora en el cobro de los certificados, lo cual compromete su situación financiera, como sucediera también con la firma Plantel, siendo el titular de la misma quien lanzara las primeras señales de alarma, en relación a la falta de cumplimiento y demoras prolongadas en los pagos.
Ahora en el propio gabinete, la situación se ha tornado insostenible, y el intendente Gustavo Pulti ya consulta eventuales nombres de reemplazantes. “Si no me equivoco, Pulti es de Independiente (dijo nuestro interlocutor), Garnero ya se fue” agregó “¿Quién viene Gallego, Gamboa o Trossero?”, finalizó ya en tono de sorna.