Acción Marplatense pasará de la mayoría propia a una ajustada primera minoría, con lo cual la nueva composición del Concejo Deliberante soplará esta cómoda situación oficialista a partir del 10 de diciembre. Se descuenta que el partido de Pulti accederá a 3 / 4 bancas, renueva 8 de 2009, pero la pelea interna del Frente Para la Victoria lo condiciona dentro del mismo espacio.
De los votantes de Pulti, habrá una mutación hacia la alianza que integre la UCR, que mucho dependerá de quién encabece la lista, ya que la interna en el radicalismo es verdaderamente feroz y complica aún el armado con el Gen y el Socialismo. Qué porcentaje de votantes podrá captar el PRO como nueva fuerza política en la ciudad es otro de los interrogantes, y falta saber si el partido de Mauricio Macri podrá perforar el 8,33 % necesario para llegar a una banca. Quien tiene más clara su posición, es el actual concejal doctor Fernando Arroyo, quien ha mantenido hegemonía a la hora de convocar al peronismo disidente, elección tras elección. Hoy Arroyo mantendría 4 bancas sino hubiera sufrido la partida de dos tránsfugas como Mario Luchessi a Acción Marplatense y Hernán Alcolea ahora enrolado en el PRO. Arroyo cuenta con el apoyo de Gerónimo “Momo” Venegas.
Peleas por las alianzas, disputa por las candidaturas, ponen al rojo vivo la contienda electoral. Los funcionarios en cargos ejecutivos esperan dar el salto al legislativo, otros buscan posicionarse, llegar a una banca y hasta ir por la intendencia. Ni hablar a los que los desvela la reelección, que muchas veces y a la luz del día le critican a CFK.
A seis años de gobierno, y con más de 20 en el candelero político Acción Marplatense y Pulti han llegado a su techo y comienza para el partido vecinal el perigeo, con un invierno duro. Ya no tiene espacio ni margen para un golpe de timón, tras haberse colgado de las tetas del gobierno nacional, hay un punto de no retorno.
Ya es mucho más claro en la foto qué es el Frente Para la Victoria y este apéndice que jugó Gustavo Pulti con muy buenos resultados. Para el intendente hay una sola opción que alguien lo rescate como necesario en La Quinta Sección Electoral, y le tienda un puente de escape, hoy más difícil con la caída en las acciones de Florencio Randazzo.
Por estos días el espacio electoral de las fuerzas con representatividad en el HCD de General Pueyrredón y Batán, está dividido en cuatro, y la tendencia más probable para octubre es 3 concejales para cada. El doctor Carlos Fernando Arroyo posiciona su hegemonía en el peronismo disidente. Ya sabe lo que es ganar bancas, aspira a la intendencia en 2015 y tiene abrochado el apoyo de Gerónimo “Momo” Venegas, desechó ofertas de De Narváez y dijo que no quería en su lista salteadores del poder, y que su espacio no negociaba candidaturas por dinero. Arroyo sabe que conserva una franja de militancia de peronistas de Perón. Esa fidelidad lo fortalece y se constituye en referente excluyente del peronista que no cree en Francisco De Narváez y sus delegados
Aunque viva un clima de aire irrespirable, la UCR por errores y omisiones ajenas, acuerdos nacionales y provinciales, alientan a recuperar el verde perdido tras una caída vertical, en 10 años perdió 150.000 votos. Ahora aspiran como objetivo, a recuperar el Concejo Deliberante e instalar un candidato a intendente para el 2015. Pero hay decisiones que conspiran contra el conjunto de los socios, y todos se alinean detrás de la misma idea: “Que Tato Serebrinsky encabece la lista de concejales, es lo más piantavoto de que se tenga memoria”, sostienen. Además de complicar la entramada interna radical, provoca directamente rechazos en los socios de la fórmula con el GEN, el Partido Socialista y sectores afines. Oscar Pagni reúne voluntades hacia adentro y hacia afuera, y se cree que no se resignará a ceder espacio a un candidato que puede comenzar a devolver el brillo perdido.
Es más agregan “Nadie está dispuesto a tirar dinero en la campaña” con lo cual las posibilidades, se reducirían por una propia conspiración interna. Todavía no ha quedado bien plasmado, pero cuando se den cuenta de lo qué pasa, ya las explicaciones estarán demás, y recuerdan “ya nos pasó con De Narváez” y comienzan a mirar a Mario Rodríguez y Ricardo Alfonsín, como los responsables de patear el hormiguero, de bajar un acuerdo que tiene un rechazo abrumador.
Coincido plenamente con que la aparicion deSerebrinsky en cualquier lista tendrá un “efecto piantavotos”