Ahora son doce puros de Acción Marplatense, trece con el aliado Luchessi, (entró con Rodríguez Saá) Hay tres del Frente Para la Victoria, son 16; hay tres de Fernando Arroyo (que entró con Duhalde), que suman 19 y los cinco de la UCR que completan las 24 bancas del Concejo Deliberante. Es la expresión marplatense del partido casi único, desde el 10 de diciembre en el HCD.
La alineación política de Acción Marplatense con Nación y Provincia, produce forzar una interpretación, que supone abarcar las reacciones de suma de poder de CFK, de quienes se alejaron de los K, para buscar refugios en campamentos de base en el P.J. Hoy ya están pegando la vuelta.
En este “racconto”, la cantidad y la calidad de la oposición, vuelve inalterable la mella que pueden provocar en el oficialismo. Gustavo Pulti ha fortalecido su estructura y poder político, es parte además de papel protagónico, en lo que se ha dado en llamar testaferros políticos. ¿Cómo desasociarlo entonces del enlace que lo encadena al poder nacional?
Pulti ha sido contenido también por Daniel Scioli, jugó fuerte en lo que el gobernador define como la articulación de Nación, Provincias y Municipios. Hoy los problemas de los gobiernos, exceden lo político, ya se manifestó el pueblo. Tras una primera semana como electos, la tormenta ha comenzado a oscurecer el horizonte, no sólo por el dólar y el ahora más combativo Hugo Moyano. Todas estas complejas variantes, y otras, se manejan dentro de una misma transición, en virtud de los triunfos oficialistas.
La dinámica de los acontecimientos, hace desaparecer este lapso imperceptible, que va del 23 de octubre al 10 de diciembre. Las exigencias son ya, precisamente por la continuidad. No habrá luna de miel, ese período de encanto que siempre tenían los gobiernos nuevos. Este no es el caso.
Tan sólo siete días, sirven para acentuar las dudas y profundizar esa brecha de rechazo, de casi una misma proporción de argentinos, que votaron por Cristina. Es como que no se han despejado las sombras, sino que se han instalado, que hace falta otra rigurosidad, que supone menos demagogia con decisiones más duras. ¿Los más afectados? Serán los que acompañaron electoralmente a Cristina, Scioli y Pulti.
En el Frente Para la Victoria, con las urnas calientes, después de la acetona, ya se pintaron la cara para ir por el Partido Justicialista. Esa fue la reacción. ¿A quién le importa? En una pelea que no tiene interesados. ¿Pero cómo harán para diferenciarse? en un marco complicado. Ninguno de los tres concejales que ocuparán sus bancas, responden al ingeniero Carlos Cheppi, sino a Vacante, Segarra y Daniel Rodríguez y han invertido económicamente mucho, en esta campaña saturada de propaganda.
Hubo más palabras cargadas de fuegos artificiales y afirmaciones que provienen del despecho de la caída del FpV. “Ahora vamos por él (Pulti)” y “vamos a ver cómo hace para pagar ahora” imaginando un escenario desfavorable, para el cual no existe ni el más mínimo indicio político, desde las entrañas del poder nacional y provincial.
De Carlos Arroyo se esperó mucho más, en estos dos últimos años como opositor. Hoy discute dos lugares en el escrutinio definitivo. No obstante, Arroyo se definió como de raíz estrictamente peronista, por eso le daba lo mismo ir con Rodríguez Saá, Duhalde, De Narváez o Barrionuevo. ¿Cuál será la cuña que podrá meter en la Municipalidad? La impresión deja lugar para un interrogante y el margen qué hay, hasta haber alcanzado su techo electoral.
¿Qué ofrece la UCR, como opción? Debate, dudas y dilemas, para encontrar una identidad, ¿Tiene intérpretes? Hay guantes que se recogen, experiencias sufridas, apariciones cargadas de intencionalidad. Últimamente los fracasos, han superado cómodamente a los éxitos electorales. Ha sido desteñido su papel desde la oposición. La candidatura de Vilma, hasta se podría decir que terminó hasta salvando la ropa. Unos no pueden mostrarse por su pasado K, otros son parte del alto costo que se pagó por sumar con De Narváez, en el caso de Aprile lo hace con las heridas sangrantes, pero muy distanciados de todos. Maximiliano Abad clavó su bandera con Ernesto Sanz, pero su integración en el bloque, necesita más protagonismo y menos segundo plano, condición en la cual deriva, sin definirse. Es evidente que no hay amalgama, mucho por recuperar y nada para repartir, sólo dos concejales han quedado después de 20 años de gobierno desde 1983. Son más 100.000 votos los que ha perdido la UCR. No fueron el “Japonés” García, pero estuvieron ahí.
Ha quedado claro que nadie agarró la manija para discutirle a Pulti. Es un caso de testaferro político, que no necesitó pertenecer como le reclamaban absurdamente desde el FpV. Otro caso de testaferro político es el del presidente del HCD. El arquitecto Marcelo Artime, se desconoce si por necesidad o por convicción, se abroquela a la estrella encendida del firmamento político, que se ha construido alrededor de Amado Boudou, el vicepresidente electo de la Nación, que no medía para ser candidato a intendente de General Pueyrredón o jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
¿Quién le va contar las costillas a la situación económica-financiera de la Municipalidad? ¿Qué grado de credibilidad tendrá un presupuesto votado con mayoría propia? Hasta ahora se había tenido una voz discordante, la del contador José Cano. El candidato del Frente Amplio Progresista, fue absorbido por quienes no querían que ganara Cheppi y por quienes no querían que ganara Pulti. Es claro que en mayor o menor medida ni Cano ni Arroyo, fueron tenidos como alternativas, por armados políticos distintos, esas ofertas no cautivaron, se prefirió otro menú casi en una virtual polarización. Se dio en el caso de intendente, si analizamos el corte de boletas que hubo tanto en la presidencial, gobernador, como en legisladores nacionales y provinciales.
Jorge Elías Gómez
De una claridad inigualable, nuevamente felicitaciones por el analisis politico objetivo, al que nos tiene acostumbrado