Cualquier vecino de nuestra ciudad que use a diario el transporte público de pasajeros sabe que el mismo no es el ideal y ni mucho menos el óptimo. La falta de respeto a las frecuencias, caminar decenas de cuadras para cargar una tarjeta (situación que se agrava en los barrio más alejados donde precisamente es donde más se utiliza), unidades que dejan mucho que desear, escasa preparación profesional de los choferes para resolver ciertas contingencias, son algunas de las variadas quejas que los usuarios hacen a menudo sobre el sistema.
Sin embargo poco o nada se ha discutido en los últimos años sobre esto, es decir sobre cómo mejorar, como controlar su buen funcionamiento o como proyectar un sistema que imite a los mejores de la región.
La única discusión que existe es sobre rentabilidad, como generar mas o como evitar que quienes son los responsables de su explotación pierdan la misma, así una o dos veces al año los marplatenses y batanenses recibimos golpes al bolsillo para mantener un sistema que huele a obsoleto.
En estos días nuevamente se trata un aumento del boleto. Recordemos que ya se aumentó en el mes de enero un 22% y ahora la suba sobrepasa el 11%, es decir un 33% de aumento en un año, un porcentaje superior a la paritaria acordada por UTA y también a los índices oficiales de inflación del INDEC.
Al pedir los informes técnicos al Poder Ejecutivo Municipal, entrega informes incompletos, amañados y con poco rigor técnico, así y todo el Intendente Pulti les solicita a los concejales que aprueben este nuevo aumento ya que para éste “es entendible” este nuevo pedido de los empresarios. El Intendente, uno de los máximos obsecuentes del Gobierno Nacional, parece tampoco creer en los índices oficiales.
Entendemos que es momento de reflexionar, de atender las inquietudes de los usuarios, de pensar integralmente en este sistema, es decir no sólo en la problemática tarifaria, sino pensar en el mismo en su totalidad, no se puede seguir atendiendo lo urgente por encima de lo necesario, no se construyen políticas a largo plazo de esta manera. Sería prudente convocar a audiencias públicas donde no sólo se escuche la opinión de empresarios o gremio, sino que también intervengan asociaciones de usuarios como sucede en otras partes del país cuando se intenta aumentar un servicio.
Por este motivo, nuestros concejales deben dar un mensaje a los vecinos de Gral Pueyrredón, votando en contra del pedido de aumento, que se hagan cargo aquellos que defienden esta economía y sus números, el radicalismo debe plantear seriamente un debate estructural del sistema que haga del Transporte Público de Pasajeros un sistema integrador, moderno, eficiente, económico y al servicio de la gente.
Sólo de esta manera estaremos defendiendo a quien realmente importa y nos apoya en nuestra labor deliberativa que es el vecino de General Pueyrredón.
MESA DE CONDUCCIÓN PARTIDARIA
UCR Mar del Plata – Batan
