Intendentes del conurbano se reunieron en las últimas horas con Julio De Vido y Amado Boudou. Llevaron los habituales reclamos de partidas presupuestarias para completar obras de infraestructura y para reforzar la seguridad en sus municipios. Pero esta vez sumaron un planteo inesperado para los ministros.
Los caciques se mostraron preocupados por la quita en los subsidios de los servicios públicos. ¿En qué los afecta? Es que los intendentes saben que las tasas municipales son históricamente las que los vecinos dejan para lo último en sus prioridades de pago. Primero se abona agua, luz y gas, se pagan otros gastos, y recién al final, si a las familias los sobra dinero, pagan el impuesto municipal.
Hay muchos jefes comunales que reconocen que las tarifas de los servicios congeladas de los últimos años contribuyeron a que aumentara la recaudación de sus tasas municipales. Y ahora temen a un camino inverso.