El proyecto de presupuesto 2022 para la Provincia de Buenos Aires contempla gastos totales por $ 3.1 billones, un aumento de los impuestos patrimoniales con topes para la mayoría de los contribuyentes y un déficit similar al del año pasado.
Las principales variable del proyecto fueron presentadas ayer a los legisladores del oficialismo y la oposición por el ministro de Economía provincial, Pablo López y el presidente de la Cámara de Diputados, Federico Otermín, en una reunión que se llevó a cabo en el palacio legislativo. También participó el jefe de Gabinete, Martín Insaurralde.
López definió al proyecto como un “Presupuesto propio del inicio de la etapa de consolidación de la recuperación económica” que según explicó se está dando en la provincia sobre todo en el sector industrial “pero que desde agosto empieza a ser bastante homogéneo” después de la “doble crisis de la recesión 2018.2019 y de la pandemia”. También dijo que refleja y de “un Estado que impulsa y fomenta esa recuperación”.
En materia de recursos, el proyecto prevé un gasto total del $3.1 billones (un billón es un millón de millones) con un nivel de inversión de capital (infraestructura) de $260 mil millones (los sub rubros más importantes son rutas, con $40 mil millones y vivienda, 21 mil millones
En tanto, el tercer eje del cálculo de gastos y recursos está puesto en la educación, en la que se prevén gastos por más de $900 mil millones “lo que implica alcanzar el 29,5% del total del presupuesto de la provincia para recuperar la caída que había tenido hasta el 2019”.
El funcionario explicó que se continuará invirtiendo en el fortalecimiento edilicio y en tecnología educativa de todas las escuelas de la provincia, así como en los programas Escuelas a la Obra, el programa integral ATR de acompañamiento de las trayectorias educativas; y la Escuela Provincial de Formación de Equipos de Supervisión y Dirección.
En cuanto a la inversión en seguridad, será de $ 47 mil millones, un 200% más respecto al 2019, de los cuales más de 20 mil millones son para equipamientos y unos 7 mil millones para municipios.
El quinto eje de la norma será la inversión en Salud “con eje en mantener y consolidar los avances en materia de salud pública en la etapa post pandemia” para lo que se destinarán $ 135 mil millones, un 80% más que en el 2019.
La inversión abarca medicamentos, insumos médicos, equipamiento sanitario para hospitales, el Programa materno infantil y nutrición PRO.M.I.N, Unidades de Pronta Atención, e Infraestructura en Centros de Atención Primaria, entre otros.
La “Perspectiva de Género” es el último eje para el que el gobierno destinará casi $ 75 mil millones destinados a programas tendientes a reducir la brecha de género en la provincia de Buenos Aires.
En su exposición, López aseguró también que el proyecto de presupuesto contempla un pedido de financiamiento de unos $ 210 mil millones.
Respecto del capítulo impositivo, el ministro informó un incremento de los impuestos Automotor (patentes) e Inmobiliario en todas sus variantes del “35% para la mayoría de los contribuyentes”, aunque el sistema de topes que se aplicará permitirá subas sensiblemente mayores ´para los contribuyentes de mayor capacidad económica. En el caso de Ingresos Brutos, se indicó que no habrá bajas significativas en las alícuotas pero que se elevó en 101 el tope para ingresar en el régimen de alícuota reducida, lo que apunta a beneficiar a las PyMeS.
En el capítulo financiero, se informó que el déficit primario será de $48.800 millones, uno financiero de $133 mil millones, lo que genera una necesidad de pedir autorizaciones de endeudamiento a la Legislatura por $120 mil millones, lo que López consideró “un nivel bajo” en relación al total de recursos del presupuesto. (DIB) AL
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