El concejal de la UCR, Daniel Núñez, presentó ante el Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para fomentar las adopciones de niños y adolescentes en General Pueyrredon.
Según los datos de la Dirección Nacional de Registro Unico de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (DNRUA), en Argentina hay 2199 chicos en situación de ser adoptados. Por otro lado, hay muchas personas con el deseo de adoptar, sin embargo, el proceso adoptivo puede resultar complejo y abrumador.
Ante esta realidad, y frente a la necesidad de avanzar desde la esfera municipal con propuestas de promoción y acompañamiento, Núñez propone la creación del “Programa de Promoción y Apoyo para Adopciones”.
El programa tiene el objetivo de brindar un dispositivo de información, acompañamiento, promoción y apoyo técnico a personas del Partido que estén interesadas en iniciar y/o que hayan iniciado un proceso de adopción, “siempre poniendo el foco en el respeto por el interés superior del niño y adolescente y en su derecho a tener una familia que pueda brindar los cuidados parentales”.
El concejal radical explicó que “mediante la realización de talleres, ciclos de charlas, entrevistas y encuentros grupales se busca informar sobre el proceso de adopción, brindar orientación legal, psicológica y social, generar un espacio de intercambio de experiencias y brindar asistencia profesional para prevenir disfunciones en el vínculo parento-filial”.
Y continuó: “El proyecto apunta a fomentar las adopciones sin edades, con especial énfasis en los grupos de hermanos y de niños y adolescentes con discapacidad”.
El Ejecutivo municipal lanzó hace pocas semanas el ciclo de charlas “Uniendo caminos”. Según indicó el autor del proyecto “la idea es seguir apuntalando este programa y que se convierta en política de Estado para garantizar el derecho de los niños y adolescentes a vivir y desarrollarse en una familia que les procure los cuidados tendientes a satisfacer sus necesidades afectivas y materiales, aun cuando no sean su familia de origen”.
Por último, señaló “la necesidad de abordar todo el proceso con un enfoque integral, priorizando en todo momento el bienestar de niños y adolescentes que se encuentren en situación de vulnerabilidad”.
