Tras los anuncios del ministro de Economía, Luis Caputo, consultamos a referentes del sector sobre el impacto que tendrán en la industria. La liberación de las importaciones con aumento del impuesto PAIS; devaluación, suba de las retenciones al 15% y el consecuente efecto sobre las paritarias. También hablamos sobre la acefalía en la cartera de pesca.
Las medidas anunciadas el martes por el flamante ministro de Economía, Luis Caputo, generaron preocupación en el sector pesquero, sobre todo por ser incluido en el aumento de retenciones. En un escenario de precios internacionales a la baja, disminución de la demanda y altos costos, la situación parece complicarse más aún, a pesar del aumento del tipo de cambio a 800 pesos. Con la aplicación de las retenciones, el sector pasará a tener un dólar de aproximadamente 730 pesos y un esperable aumento de costos producto de la alta inflación. Es por ello que hemos realizado una serie de preguntas a los referentes del sector para conocer su opinión. Eduardo Boiero, presidente de CAPeCA; los empresarios Ventura Lafuente y Pablo Otegui; el gerente de CAPIP, Agustín de la Fuente y el presidente de ALFA, Mariano Retrivi, dan su punto de vista.
Hay un dólar de 800 pesos pero aumentan las retenciones y los costos seguirán al alza. ¿Quedan en una situación peor a la actual?
Desde CAPeCA, la cámara que agrupa a los empresarios congeladores, su presidente, Eduardo Boiero, ha señalado que consideran “una buena medida actualizar el tipo de cambio, llevándolo a un valor que sea más realista. Con relación al aumento de los derechos de exportación, obviamente nos sorprendió mucho y creemos necesario que el tipo de cambio no pierda frente a la inflación en los próximos meses”.
Desde CAPEAR-ALFA, la cámara que nuclea a barcos fresqueros de la ciudad de Mar del Plata, su presidente, Mariano Retrivi señaló respecto del aumento del dólar: “A priori parece un beneficio para los exportadores, sin embargo, deberemos convivir con varios dólares, cuyas cotizaciones también impactan, por ejemplo, en el precio del combustible y en los insumos importados, entonces debemos ser prudentes, porque somos industria y cargamos mucha maquinaria que obliga a importar fuerte o quedar parados. Asimismo, la escalada inflacionaria nos complica muchísimo todos los eslabones de costos para pesca (captura; logística; procesamiento, almacenamiento y distribución; exportación) y producción. Por otra parte, consideramos que la reducción de subsidios a la energía y el transporte se debía sincerar; no obstante, ello nos aumenta costos de producción y logística”.
Sobre el aumento a las retenciones señaló Retrivi que “el Ministro expresó que una vez finalizada la emergencia, se avanzará en la eliminación del pago de todos los derechos de exportación, pues, según el funcionario, constituyen un gravamen perverso que entorpece el desarrollo de Argentina. Coincidimos con el ministro en el concepto, sin embargo, en el mientras tanto aplica un aumento de los derechos del 15 por ciento y en el caso de nuestra industria, esta medida podría fomentar canales informales, especulaciones, desincentivo al valor agregado y fuerte pérdida de competitividad frente a países reprocesadores de nuestros commodities. Muy mala esta medida. ‘De esta manera, beneficiamos a los exportadores con un mejor precio y equiparamos la carga fiscal para todos los sectores, dejando de discriminar al sector agropecuario’, ha dicho el ministro. Y aquí claramente se nota que solo pensaron en la cosecha gruesa y en los tipos de granos, ¿Y el resto de la Industria? Bien, gracias por ahora”, concluyó el presidente de ALFA. Desde CAPIP, su gerente, Agustín de la Fuente ha señalado que “el sector pesquero en general venía reclamando por el atraso cambiario y vemos con buenos ojos achicar esta brecha, pero si se van a disparar los costos, no sirve de nada, sobre todo ante la falta de demanda comercial que flaquea márgenes. Por otra parte, nos preocupa el hecho de las retenciones porque no dejamos de ver que ya teníamos retenciones y había una promesa de quitarlas, por lo que no esperábamos que las incrementaran. Nosotros necesitamos que no nos carguen más con costos y retenciones porque no mejora la cuestión comercial, no hay demanda de entero, estamos peleando en la cola 2 que compite con el vannamei que no tiene aranceles mientras nosotros tenemos un 12 por ciento para ingresar al mercado europeo. Me parece que nos tienen que hacer más competitivos”.
Buenaventura Lafuente, empresario a cargo de Estrella Patagónica, ha considerado que si bien todavía no tienen claro los detalles de todas las medidas, “en principio pensamos que tendremos suerte si la devaluación alcanza a cubrir las nuevas retenciones, la inflación y la presión que tendremos para renegociar convenios”.
Pablo Otegui, directivo de Pesquera Veraz: “Yo estoy muy preocupado… El título dólar a 800 sonaba razonable para recuperar competitividad; pero los derechos de exportación del 15% pulverizan todo. Hoy no estoy siendo nada optimista, voy a esperar para ver todo por escrito y luego analizaremos”.
Eliminación del SIRA
Las importaciones se comenzarán a pagar con el nuevo dólar de 800 más el 17,5% de impuesto PAIS; se aplicará un cronograma de vencimientos, ninguno tendrá un plazo menor de treinta días y se implementa un nuevo sistema, con un monitoreo de lo que se está importando, pero no será exigirá un pedido de permiso. En cuanto a la deuda comercial, se va a revisar primero cuán reales son esas importaciones, no estando garantizada la entrega de dólares y se comenzará a pagar a partir del mes de marzo, cuando se dará a conocer el cronograma de pagos para la cancelación de deuda.
La eliminación del SIRA mejorará la situación para las importaciones, ¿pero el aumento del impuesto PAIS en qué medida afectará?
Eduardo Boiero: “Es una buena noticia, pero veremos en la práctica cómo podemos funcionar con las importaciones ya que los proveedores no necesariamente aceptarán las condiciones y formas de pago… veremos”.
Agustín de la Fuente: “Todavía faltan muchos detalles sobre las implementaciones, es algo que veníamos reclamando y parece que ahora va a ser más normal. Sobre todo, para esta que es una actividad en la que las importaciones son algo esencial para que podamos funcionar, insumos, máquinas, repuestos”.
En la misma línea, se pronunció Ventura Lafuente: “Está bien que desaparezca y aunque también es cierto que saldrá más caro importar, yo prefiero traer lo que necesito sin depender de autorización”.
Paritarias
Con la devaluación y una inflación que se mantendrá en dos dígitos por varios meses, la cláusula de revisión de los acuerdos salariales puede ser materia de discusión en cualquier momento. Por lo que consultamos al sector empresario sobre qué piensan que puede pasar con las discusiones paritarias.
Agustín de la Fuente: “Todo acuerdo paritario suscripto tiene una cláusula de revisión, que no quiere decir que se active, pero como todos los argentinos estamos atentos en ver cómo va a impactar en los precios básicos de la canasta alimentaria, es muy pronto para analizarlo pero estamos al pie para ver cómo va a repercutir”.
Cauto, Ventura Lafuente señaló al respecto: “Seguro que los gremios querrán reabrir las paritarias, nosotros intentaremos llegar a las fechas que se pactaron para la revisión”.
Para el presidente de CAPeCA la suba del dólar no le acarreará un problema a la hora de negociar paritarias, dado que, “el tipo de cambio les genera una mejora sustancial”, indicó en referencia a las tripulaciones.
En ALFA avizoran un problema relacionado con el trabajo en negro más allá de lo que pueda ocurrir con las paritarias: “No nos corresponde opinar si regalar dinero está bien o está mal, pero si sabemos que ayudar a la Sociedad, también sería crear reglas laborales que incentiven la contratación de privados, cuestión que aún no vimos. Claramente mucha gente no se volcaría al mercado laboral formal, si eso implica perder la ayuda”, considera Retrivi.
Revista Puerto
