“Junto a Guillermo trabajamos juntos, más allá de pertenecer a partidos políticos totalmente distintos. Siempre a la hora de trabajar nos encontró en una mesa viendo qué es lo que aportamos para que a nuestros ciudadanos les vaya mejor”, la expresión corresponde a Sergio Berni, el ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, y Guillermo a quien menciona, no es otro que Montenegro, el intendente de General Pueyrredón.
Hay malas noticias. Como lo refleja Berni, llevan juntos muchos trabajando en seguridad para los vecinos. Es una vieja historia que merecería abandonar el relato de estos dos políticos y transformarse en los hechos reales, que los vecinos debemos afrontar en nuestras calles y viviendas.
Berni y Montenegro, fueron contemporáneos cuando ocupaban sus cargos en los gobiernos de la Nación y CABA, respectivamente y de manera recíproca han dado a conocer en forma pública, que existe la mayor empatía entre ellos. Transmiten algo más que una sensación de que comparten algo más que sus circunstanciales cargos como funcionarios públicos. Obvio, que también entre ellos, andaba Aníbal Fernández, en alguno de los 22 cargos que ocupó en la función pública.
La figura se reitera ahora, en la Provincia de Buenos Aires está Berní y en Mar del Plata está Montenegro, se reeditan los años en CABA y en el gobierno nacional. Es necesario hacer foco puntual en este asunto, porque además lo borraron de la escena nada menos que al gobernador Axel Kicillof, como si estuviera eximido de sus responsabilidades.
¿Por qué? Porque están vendiendo humo, nos están “saraseando” mal y nos están dejando a merced de delincuentes, a riesgo de perder la vida propia, de un familiar, de un amigo o de un habitante más de la ciudad, o simplemente de un “laburante” como dice el manual de los couching de Montenegro.
Es fatal literalmente, para la comunidad marplatense, que las fuerzas políticas que comparten entre Montenegro y Berni reúnan el 80 % de los votos de la ciudad, expresado en 8 + 4 bancas para Juntos y el FdT, como lo indica el resultado de las PASO celebradas el 12 de setiembre, hace sólo 14 días.
¿Qué tienen para ofrecernos? El ministro y el intendente, cómo se dice vulgarmente y en términos callejeros tienen prendida fuego sus respectivas jurisdicciones. Con dos datos nuevos ya no está Sabina Frederic y quien ha llegado en su reemplazo es nada menos que Aníbal Fernández, quien dispondrá de ahora en adelante del manejo de las fuerzas federales, tan reclamadas en Mar del Plata.
Estamos en problemas. En esta simbiosis, Mar del Plata es el furgón de cola de los ministros en Nación y en Provincia. Y es híper recomendable, más allá de una sugerencia, no quedar prendados por las promesas y anuncios de ninguno de estos protagonistas, que están de paso por sus respectivas jurisdicciones, en la República Argentina, en la Provincia de Buenos Aires y en General Pueyrredon.
Y mucho más desde hoy y hasta el 14 de noviembre, porque están en tren electoral. Los que verdaderamente nos jugamos la vida cuando salimos a laburar (dixit Montenegro). Ya es un peligro salir a dejar la bolsa de los residuos al cordón de la vereda, o cerrar las ventanas que dan a la calle. Y no es el propósito generar temores infundados, sino expresar desde un medio de comunicación, cuál es la realidad y atar los cabos correspondientes. A los efectos de echar luz y saber dónde estamos parados.
“Nos juntamos dos que entendemos de lo que hablamos”, dijo Berni al término de su primera reunión con Aníbal Fernández abrazados en una foto. ¿De un mismo trío podría formar parte Montenegro? Lamentablemente si, y los resultados reflejan esta realidad que nos invade sin pausa, y observamos como el intendente marplatense se asocia en los repulgues de Sergio Berni y Aníbal Fernández. Será ahora éste, quien en lugar de Frederic, disponga el envío de fuerzas federales.
A ver si nos encontramos con la sorpresa, de una nueva expresión tipo solicitada, como la que acaban de emitir legítimamente todos los integrantes de la comunidad de actividades turísticas de la ciudad, donde le reclaman a Guillermo Montenegro que ”sea mejor gobernante”.
Hay demasiadas coincidencias que se transforman en evidencias que este trío (Aníbal, Sergio y Guillermo) nos embarcará en un nuevo laboratorio del vamos viendo y así vamos tirando, cuando como siempre nos conducen desde la comunicación y no desde la información. No saber que pasa en materia de seguridad puede ser trágico, sin eufemismo alguno, todos estamos en el bolillero.
Y no sería honesto adjudicar esta actualidad, al asesinato de “Lele” Gatti ocurrido en la madrugada de ayer en Playa Grande, frente al único hotel cinco estrellas de la ciudad, por donde transitan millones de argentinos y lugar obligado de quienes llegan a la ciudad. Siempre en este tipo de circunstancias, hay un caso bisagra, un detonador, y muy posiblemente este sea un nuevo ejemplo. Un solo disparo en el corazón se llevó la vida de DJ, de sólo 32 años.
Estamos rodeados de especialistas, de expertos en seguridad, de cámaras de vigilancia con moderna tecnología, de conexiones de las mismas entre privadas y públicas para aumentar la efectividad. Nadie vio a la policía en el lugar ni en las cercanías del hecho. Hay que mirar además quién es el fiscal general a cargo de la investigación, un burócrata que apila expedientes según el momento político que vivimos: Fabián Fernández Garello, es su nombre completo.
Este asesinato de Lele Gatti no es un caso más. Como tampoco lo fue el juicio por jurados del caso El Durazno. La fiscal Andrea Gómez tiene a su cargo la investigación, con la intervención de la Jefatura Policial Departamental de General Pueyrredón. Ya para pasado mañana se ha organizado una marcha por el esclarecimiento del asesinato. Toda una señal.
Y finalmente la Comisión de Seguridad del HCD de la MGP, ultima la declaración de emergencia en seguridad y brindar mayores herramientas al Departamento Ejecutivo, para combatir el delito en todos los ámbitos de la ciudad.
Montenegro, muy a pesar de lo esperado, no ha resultado eficaz en cumplir con sus antecedentes y promesas de instalar su despacho en el COM. A muy pocas cuadras, hace sólo unos días hinchas de Aldosivi, hirieron en un ojo a un jugador a piedrazos, haciendo estallar un vidrio del colectivo que transportaba a todo el plantel. Una semana antes, la misma parcialidad, había atado cabeza hacia abajo en un poste a un hincha de Lanús. No hay que ser para nada optimista con el regreso del público a los estadios de fútbol, no es recomendable.
Será muy áspero sin dudas, el próximo debate sobre la declaración de la emergencia en seguridad en el Concejo Deliberante. Allí estarán sentados los concejales que representan el 80 % de los votos de la ciudad, casi resulta una paradoja porque sabemos que no hace falta declarar la emergencia, porque los habitantes de a pie ya la estamos transitando. Es una herramienta política administrativa, detrás de la cual están Aníbal Fernández, Sergio Berni y un inesperado consorte como Guillermo Montenegro, quien llegó ostentando ser muy ducho en la materia.
Esto no es una cuestión política, cómo se intentará usar como pretexto o excusa , por más tiempos electorales que estemos viviendo, es el día a día, y a otro perro con ese hueso.
Jorge Elías Gómez