El Frente Amplio Progresista de Mar del Plata participará activamente de la conmemoración del Día Nacional de la Memoria. El viernes 22, a las 17 hs, en San Luis y Peatonal San Martín, instalará una mesa de difusión de su declaración sobre el particular; en tanto que convoca a simpatizantes y ciudadanía en general a participar de la marcha del domingo 24, concentrando a las 16 hs. en Av. Luro y San Juan.
La conmemoración del 24 de Marzo es inherente a todos los argentinos, tanto oficialistas como opositores. Y en ese sentido la realización de actos opuestos ese mismo día es un mal signo para la convivencia democrática. Es achicar la convocatoria y despoblar las calles.
A treinta y siete años del 24 de Marzo que marcó el comienzo del período más negro de la historia argentina debemos hacer un sincero y profundo ejercicio de reflexión y memoria que nos permita identificar cuánto hemos avanzado y cuáles son las deudas que quedan sin saldar.
Luego de un período de violación sistemática a los derechos humanos, encaramos como sociedad un proceso de reparación social. Ello implicó tener como bandera principal el “Juicio y Castigo”, cuyo primer objetivo era dejar en claro que se había pergeñado y puesto en práctica un plan sistemático de secuestro, torturas y exterminio, importando una conducta criminal por la cual todos sus responsables debían ser juzgados. Y así mostrar a nuestras generaciones futuras y al mundo entero que esa conducta no sería tolerada en ningún lado ni en ningún tiempo, y que Argentina no sería la excepción.
La realización de justicia, a partir del desarrollo de los juicios orales para juzgar a los máximos responsables del terrorismo de Estado, es un hito indispensable para construir una sociedad profundamente democrática y evitar que sucedan nuevas violaciones de los derechos humanos, pero no el único. Logramos que se condenara a 378 personas.
Hasta aquí con dificultades, con avances y retrocesos seguimos manteniendo firmes los pilares de Verdad y Justicia por los que bregamos desde que recuperamos la democracia y con ella dijimos como sociedad “NUNCA MAS”. Pero nuestras demandas no cesan allí. Creemos fervientemente que un estado profundamente democrático y socialmente justo debe hacer que el efectivo goce de los derechos humanos sea prioridad. Y para ello es necesaria la memoria. Allí se encuentra nuestro desafío. Mantener vivo el recuerdo de un pasado cuya imagen verdadera pasa fugazmente. Para hacer una realidad el respeto a nuestra dignidad y libertad. Porque recordar nos permite evitar y no repetir.
La criminalización de la protesta social, el espionaje a las fuerzas sociales y políticas opositoras a través del Proyecto X, las violentos desalojos, la represión y persecución de nuestras comunidades originarias, el sostenimiento de un modelo que mantiene la pobreza extrema de millones de argentinos, negandoles el acceso a un trabajo digno, y permitir que muera una mujer víctima de violencia de género cada veinticuatro horas en nuestro país a causa de un estado ausente e incapaz de reducir los niveles de conflictividad social, no es bregar por la vigencia de los derechos humanos, es violentarlos.
Cuando cincuenta y una personas mueren en una tragedia absolutamente evitable si se atacara la desidia del estado y la corrupción es no tener memoria y no recordar Cromañón. Por eso, es tan importante la memoria, recordar para evitar, para proteger y promover nuestros derechos, porque como dicen los jóvenes por las calles “La memoria es el final de la inocencia, soplen fuerte para generar un viento. “