Así lo confirmó el fiscal de la causa Marcos Pagella, quien comunicó que también se pidió que Guillermo Arroyo, hijo del intendente, se presente al debate.
La solicitud la llevó a cabo la defensa de Juan Carlos Belmonte, sospechado de ser el líder de la organización ilícita que distribuía carnets de conducir apócrifos. La intención es que ambos declaren como testigos durante el debate oral.
La fiscalía debe definir si accede al pedido de la defensa. Por ahora, no está confirmado si el intendente y su hijo, concejal de Agrupación Atlántica, van a presentarse. Tampoco se sabe una posible fecha.
El año pasado, Carlos Arroyo había considerado que Juan Carlos Belmonte no era el líder de la asociación encargada de vender licencias, sino que la cadena de responsabilidades involucraba a funcionarios mayores. “Ahí se cortó la investigación, pero no todo lo que se le imputa es culpa de él”, declaró en esa ocasión.
Esta misma hipótesis es la adoptada por el abogado de los acusados. Sergio Sosa Ortega, el defensor de Belmonte, calificó la postura de la fiscalía como “errónea y arbitraria” porque “está imputando como director y responsable el señor Belmonte, cuando en realidad el que mandaba era Guillermo Iglesias”.
Además, el letrado afirmó que tiene pruebas que van a ser presentadas y que los funcionarios de mayor rango “fueron selectivamente desviados del proceso penal”.
Está previsto que el juicio se extienda hasta el 5 de julio y que declaren cerca de 100 testigos.
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