“No hay que votar a la UCR, es volver al pasado”, fue la recomendación del intendente Gustavo Pulti, casi en el cierre de las elecciones. O lo dijo demasiado tarde o no le hicieron caso los marplatenses y los batanenses. Semejante error a horas del cierre de la campaña, es una demostración cabal de la desesperación de Gustavo Pulti, que una vez más no tuvo escrúpulos para medrar con los votos.
Alejandro Ferro a quien anunció el 11 de agosto como el nacimiento de la nueva referencia política de Mar del Plata, no sólo perdió sino que la diferencia obtenida por Vilma Baragiola, resultó abrumadora. Esta es una derrota que impactará muy fuerte en la ciudad, ya que la gobernabilidad de la misma dependerá de las negociaciones que se abran con la oposición.
Acción Marplatense puede llegar a perder entre 5 y 6 concejales de las 8 bancas que puso en juego, con lo cual ha perdido autonomía, independencia y la mayoría propia ya es un sueño. No debe descartarse que en el lapso que nos separa del 10 de diciembre, Pulti desconozca la voluntad popular, lo cual no será legítimo, aunque si legal.
Ya Pulti había reaccionado con actos de provocación, tras las marchas del 13S, 8N y 18 A, ninguneó a manifestaciones de 30.000 personas que clamaban terminar con la inseguridad y la corrupción fundamentalmente. Acción Marplatense pagó muy caro su alianza con el kirchnerismo, a tal punto que como partido vecinal, se ha extendido su propia acta de defunción, al introducirse en la interna peronista. Salió enchastrado y todavía falta lo peor.
La gestión de Pulti ha vivido de anuncios, efímeros, vacíos y electorales. Hay una desaprobación generalizada de la gestión, de su administración, más allá de los errores políticos de engancharse con el kirchnerismo y quedar en la intemperie, en una desprotección absoluta. Ya había intentado separarse de Cristina, pero lo hizo cuando mordió el polvo de la derrota. También en esa intentona rompió con el gobernador Scioli, otro gran derrotado de la jornada si se confirman los resultados que se están dando en la Provincia de Buenos Aires, dando como ganador a Sergio Massa.
¿Cómo se debe leer el triunfo de Vilma? Y bueno no todo lo que reluce es oro. Transformar en gestión un importante porcentaje de votos (32 %) no es fácil ni sencillo. Baragiola ha sido hábil y se ha manejado bien para llegar a los ciudadanos que han reconocido en la mujer radical una batalladora y la han elegido para ejercer la oposición a Gustavo Pulti. El Frente Cívico y Social no podrá hacerlo en soledad, necesitará de los acuerdos con otro importante número de concejales de la oposición, entre ellos Carlos Fernando Arroyo y el Frente Para la Victoria.
En declaraciones a mdphoy.com , Baragiola no excluyó la posibilidad de llevar a la justicia las irregularidades que se detecten en la gestión de Pulti. Hasta el momento la negación y el ocultamiento de los datos, le han permitido a Pulti no rendir cuentas, pero se acabó ahora deberá abrir los expedientes. Pulti y Baragiola se conocen desde hace décadas, y tal vez ese sea un problema, para saber hasta dónde han llegado los desaguisados del paradojalmente contador público Gustavo Pulti, desde el ejercicio de su función como intendente municipal.
El rojo de la municipalidad gira alrededor de los $ 300.000.000.- que en realidad no se sabe cómo se va a afrontar, ya que la caída de la recaudación ha llegado al 58 % un porcentaje que no permite hacer frente al pago de los sueldos y gastos de funcionamiento, lo cual torna inviable este tren de gastos y es inevitable pasar a una etapa de ajuste, revisión de nombramientos y asignación de prioridades en obras y servicios. Pero mañana es tarde, y ese será el gran problema de Pulti.
Durante esta gestión de Pulti en los últimos seis años, se han caído todos los ordenadores de la ciudad. Más inseguridad, mayor desocupación, límites de conurbanización desconocidos hasta el momento y precariedad laboral. Los jóvenes marplatenses deben marcharse de la ciudad por falta de trabajo. Pilares de la actividad económica como el turismo, la construcción, la inmobiliaria, la pesca están con una crisis cuya mensura no se ha determinado y no existen señales de reacción.
Mar del Plata con esta alineación política ha quedado prácticamente a la deriva. La responsabilidad de Pulti habrá de determinarse con el transcurso de los días venideros. Hay que reflexionar sobre cómo se ha comportado el electorado marplatense, si tenemos en cuenta que el intendente ha echado las bases sobre un crecimiento colosal de las erogaciones. También llama la atención que tras la instauración del boleto estudiantil gratuito y el enorme esfuerzo en la contención social, aparezca como excesivamente magro el porcentaje de votos.
Pulti ha perdido la iniciativa, ya su gobernabilidad deberá ajustarse a otras reglas de juego. Pero es evidente que ha perdido una enorme dosis de credibilidad, ha rifado un capital político que tampoco ha capitalizado el Frente Para la Victoria. Oportunamente mdphoy.com , sostuvo que Pulti ya tenía el boleto picado y así ha quedado demostrado en las urnas.
El gobierno municipal ha contado con una complicidad fácilmente comprobable desde el multimedios La Capital y un coro de aplaudidores oficialistas que eligieron aceptar la mentira, observando cómo la ciudad está en franco deterioro en todos sus órdenes.
Jorge Elías Gómez
dejense de joder con esta nota. están todos de vuelta
Varagiola hace 10 años que rompe los huevos y jamas hizo un carajo.
Daniel Rodriguez, DANIEL RODRIGUEZ! viejo choto que esta para jubilarse.
y Pulti siendo Pulti..
no hay recambio, no hay nuevas alternativas. son los mismos con otros nombres.
Varagiola = De la Rua, Pulti = UCeDe , Rodriguez = Felipe Sola, Menemismo , Gremialista de los 90