Como para comprobar el empobrecimiento cultural que vive la ciudad, el Centro Cultural La Brecha anunció que tras nueves años de actividades el próximo 27 de febrero cerrará sus puertas. Lo harán, sin abandonar el humor, con lo que denominaron como un “gran fiestón”.
La Brecha chau! es el nombre del evento con el que este espacio ubicado en Rivadavia 4651 dirá su adiós definitivo. Esto será, como se dijo, el último sábado del mes desde las 23 y se espera que en la ocasión concurran quienes “han pasado por este espacio teatral y aquellos que nunca hayan pasado”.
“Después de 9 años ininterrumpidos de destilar creatividad a través de las artes teatrales, circenses y hasta marciales, La Brecha cierra sus o su puerta y se despide con una gran fiestón gran para saludarnos y divertirnos en una noche de jolgorio, reencuentros, anécdotas, dancing y excesos varios”, señalaron a través de un comunicado.
Mientras la ciudad adhiere a diversos eventos que tienen que ver con la celebración del Bicentenario, los cuales invitan a forjar la mirada sobre la identidad, por otra parte le hace la vista gorda a lo que pasa puertas adentro de Mar del Plata: la cultura local es sobrellevada por artistas que nunca reciben el debido reconocimiento.
Ese esfuerzo no se condice con la energía gastada en otros aspectos, donde sí el Estado comunal aparece plantando bandera: interesa más la ciudad de las vedettes y los Ricardo Fort del verano, que la de los artistas propios que, ya que estamos con la monserga, son los que construyen identidad. La falta de políticas culturales es alarmante. En algún momento alguien le pondrá el cascabel al gato.
Lo cierto es que La Brecha terminará sus actividades el próximo 27 de febrero y eligen hacerlo con buen humor y sin destilar rencores. Prometen música y mucha diversión: todo lo recaudado será para solventar gastos. Mientras, los artistas de la ciudad pierden otro espacio de expresión. Y van…