Tan cierto como lo ha probado la experiencia es la sentencia del viejo dicho que señala al ser humano como el único animal de la creación que tropieza dos veces con la misma piedra es también la sentencia que titula esta nota, resultando notable que en el caso de los seres humanos que detentan la condición de políticos que ejercen la condición de cargos públicos de relevancia, tal como lo hemos señalado en más de una oportunidad demuestran una notable vocación por el fracaso insistiendo vaya a saber uno porque motivo en incursionar en medidas políticas que además de ser señaladas por profesionales sobre el tema como negativas cuentan con insalvables demostraciones empíricas de no haber tenido ningún éxito en otros lugares, resultando por otra parte no solamente inútiles sino incluso agravantes de la situación que se pretendía solucionar.-
El caso de Mar del Plata en la tan actual cuestión de la inseguridad pública, que por otra parte no le es privativo solamente a esta ciudad, sino que lo que aquí ocurre es mayormente difundida a nivel nacional por los medios de información, tenemos más de un ejemplo para sostener lo señalado en el párrafo anterior.-
El Intendente Municipal se muestra más que preocupado ante la ciudadanía con cada hecho de gravedad ocurrido en la ciudad, queriendo demostrar encontrarse comprometido en solucionar este problema a pesar de no haber dado desde hace años cumplimiento a los convenios firmados con la provincia para la provisión de combustible para patrulleros, arreglos de los mismos y demás que ha hecho que la flota automotor de la institución policial, que aún puede moverse, presente una imagen lamentable, aunque nunca demostró el mismo afán en reclamar a la provincia la cantidad de personal necesario para cubrir aunque mas no sea las vacantes que los retiros, las bajas, los sumariados, los heridos, los enfermos y las mas que numerosas carpetas médicas psiquiátricas de los egresados de las pseudo escuelas de policía.-
Hoy nuevamente nos asombra que esta misma autoridad política se ufane de que a la ciudad se le asignen fuerzas de seguridad nacionales, que como todos sabemos, más allá de su presencia poco o nada contribuirán a mejorar la seguridad del ciudadano marplatense, fresco está aún el recuerdo del fracaso de no hace mucho tiempo de la prefectura que aparte de ocasionar muy grandes erogaciones no dejó ningún saldo positivo que se conozca, mientras que el esfuerzo quedó como siempre y como quedará seguramente ahora en manos de la policía de la provincia, que con sus escasos medios y recursos deberá enfrentar como siempre lo ha hecho a la delincuencia, en estos tiempos encima sin el respaldo legal que les asegure que el delincuente quedará detenido aunque mas no sea por un tiempo prudencial.-
Las llamadas comisarías móviles, que dicho sea de paso de móviles no tienen nada resultan en lo operativo, como bien sabemos, inútiles, como lo indica la experiencia y lo señala el viejo precepto militar que asegura que “los puestos fijos minan la disciplina, cansan al personal y no cubren mas lugar que el que ocupan”, a lo que este caso deberíamos agregar que ponen en real peligro de vida al personal teniendo en cuenta que en lugares peligrosos se encuentran sin medidas de seguridad necesarias, bien iluminados e ideales para el ataque, como lo demuestran el camarada asesinado en San Martín, la compañera atacada en Balcarce y el de Miramar.- Ojala estos despropósitos no hagan caer el cargo de conciencia de alguna otra vida policial sobre quienes piden, consienten o disponen medidas como estas.-
El otro tópico que podemos señalar es que nuevamente se regresa a la propuesta de la “policía Municipal” y aquí también parece inútil haber alertado, llevando incluso carpetas con opinión fundamentada en lo profesional desde nuestra entidad al Intendente Municipal, al Coordinador de Seguridad, y a todos los concejales sobre su inconveniencia ilustrando incluso como ejemplo las dos únicas experiencias en Latinoamérica en policías municipales, como lo son México, donde como todos sabemos esto ha permitido que los carteles de narcos hayan copado totalmente las calles y los cadáveres de las víctimas de los enfrentamientos entre bandas cuelgan por docenas de los puentes o aparecen cubriendo las cunetas de las carreteras y el otro es Venezuela, que también como es sabido ostenta el mayor índice de inseguridad de la región.- Si este es el destino que estas autoridades están buscando, con seguridad que si logran imponer sus ideas podremos llegar a igualar a los países mencionados, desgraciadamente todo será tarde sobre todo para el futuro de nuestros hijos y nietos, ojala prime la cordura y se den cuenta que gobernar no es hacer el capricho de cada uno sino buscar el bienestar para la mayor cantidad de las personas que deben vivir bajo su gobierno.-
APROPOBA, 28 de agosto de 2013.-
MIGUEL ANGEL REYNOSO
Secretario General