Operativo Pepe (por Albistur) viene hermético y está atado por Montenegro

 

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Tolosa Paz, José “Pepe” Albistur y Alberto Fernández

 

Las épocas pre electorales, cuando ya se diluye y fenece la distribución política, suele brindar sorpresas que golpean algunos intereses, cuando en realidad está agotada la representación política que ejercen los legiladores. Mucho más durante una epidemia que ha quemado todas las agendas.

Por ello llama la atención la intensidad del DE, sobre el HCD para cerrar el Operativo Pepe, como se ha dado en llamar a la adjudicación para explotar la publicidad de la cartelería en las parada de colectivos del transporte público de pasajeros.

Con el Concejo apagado, que se olvidó de la presencialidad que hoy es casi absoluta en todos los órdenes del mismo, se guardan defecciones del registro de fallas que presenta el sistema. Se ha clausurado el debate entre los protagonistas.

Y todo se reduce a sesiones con varias fotos de ediles con barbijos,  otros por zoom y al número que llevan los expedientes que tratan los temas, un engorro propenso a meter un elefante en un bazar. El debate está sepultado en el Concejo Deliberante. Y mal no le viene ni a Montenegro ni el Frente de Todos. Ninguno de los dos puede tirar la primera piedra y actúan desde la penumbra, tan lesiva para las prácticas democráticas.

Un ex concejal, con valiosa experiencia y reconocida capacidad política, confió hace unos meses “No sabemos lo que pasa en la ciudad”. Alguien que en la actualidad ocupa una banca agregó en otro momento: “Si seguimos así Montenegro nos lleva puestos a todos”, son los típicos off que se utilizan cuando la decisión es no comunicar, hacerlo deficitariamente con la clara intencionalidad de ocultar.

El gobierno municipal instauró esta práctica tan condenable e impropia de la institucionalidad y el ejercicio republicano, que nunca se vivió en la Municipalidad de General Pueyrredon. Reina el silencio, un ataque de mudez invulnerable.

Pero siempre hay trascendidos que luego se confirman, como el caso Lauría por ejemplo, de un daño e impacto que no tiene antecedentes en la vida pública de la Municipalidad de General Puyrredon, y que seguirán pendiendo hasta el 10 de diciembre de 2023.

Pero volviendo al tema del Operativo Pepe (por Albistur), el avance del mismo está en un proceso delicado, porque la complejidad del mecanismo acordado es de una instrumentación quirúrgica, por ello es necesario muy posiblemente llamar a un cirujano político de estas prácticas.

Y surgen allí vacantes muy codiciadas, que han desparecido de la discusión política, por lo menos en la superficie, pero la rapacidad no es ajena a los manejos del poder. El intendente  guarda “in pectore” el nuevo nombre de quien integrara uno de los lugares del Tribunal de Faltas. Esa costumbre de pagar con cargos públicos como método de financiar la política.

El trámite es sencillo el DE debe elevar una terna que debe ser aprobada por el Concejo Deliberante, luego el intendente ( en este caso Montenegro) debe elegir a quien designará. Los requisitos con tener más de 25 años y ser abogado con más de tres años en la matrícula. Hay una súper población en Mar del Plata, pero no habrá una inscripción abierta para los que deseen postularse, se hará en función de la discrecionalidad política.

 

 

Refugios de pasajeros con carteleras de publicidad

La misión consiste en cerrar el Operativo Pepe (por Albistur), nada menos que el hombre que le alquila el departamento al presidente de la Nación, Alberto Fernández, y el esposo de quien encabeza la lista de diputados de la Nación por la Provincia de Buenos Aires, Victoria Tolosa Paz. Estamos hablando de jugadores de primera, entre los cuales siempre estuvo imbricado el intendente de General Pueyrredon, durante toda su carrera política.

Mientras tanto las carteleras de los refugios para pasajeros, instalados en la vía pública del transporte urbano, lucen de mal en peor y una pérdida millonaria de recursos se evapora en un presupuesto desinflado, hasta llevar a la administración municipal al límite mismo de su funcionamiento.

El estrecho margen político complica sobremanera a una cintura excedida que está sentenciada a vivir de los favores y errores ajenos. El 12 de setiembre hay una neutralización y el 14 de noviembre será el de las cartas echadas. En el medio ¿habrá una sorpresa? La turbulencia puede ser un estado ideal para ciertos cometidos. Todo está atado.

Con relación al tema, dice La Nación: “Las empresas de Albistur facturaron al Estado un 36% más, recibieron casi 36 millones de pesos. En 2019 hubo un gasto de 554 millones de pesos en publicidad oficial en la vía pública. En 2020 se redujo a 474 millones. Pero la reducción no fue para todos: Wall Street pasó de recibir 15 millones en 2019 a 20 millones en 2020. Otra de las empresas de Albistur pasó de 3 millones de pesos a más de 15 millones. Bastante más que la inflación”.

Unos 2.500 espacios aguardan en Mar del Plata ser ocupados por la cartelería a la que acceden las empresas que contratan espacios con Albistur. Una demanda que crecerá por sus servicios con vistas a la campaña política que desembocará en el 14 de noviembre. ¿Llegarán?, sino puede ser para la temporada.