A Pulti y Gilardi les cierra la inflación de Moreno y la política oficial de los gremios enrolados en la CGT oficial. Pero la definición estará áspera a tal punto que puede decidirse un paro para obligar a la administración municipal a hacer efectiva la recomposición salarial dentro del año que transcurre, y no estirarlo hasta febrero del 2014.
No obstante, y a raíz de las circunstancias económicas que vive el país, nuevamente perderán los trabajadores (en este caso municipales), que una vez más y sin devaluación del peso mediante, igual corren detrás de la inflación y del inexistente congelamiento de precios que el secretario de Comercio Guillermo Moreno celebra con las cadenas de súper mercados, pero que luego nadie cumple.
Trabajadores municipales que adhieren a las actuales autoridades comunales, estarían predispuestos a acompañar una vez más al sindicato, aunque no obstante se espera una asamblea muy caliente, y no se descarta que los más díscolos hagan prevalecer su posición de ir a un paro de actividades. Ya hay preparativos para copar la asamblea y que no se le vaya de las manos a la conducción de los municipales.