La política sigue con el freno de mano puesto. Hoy vuelven los Scioli por ejemplo. CFK se relanza. Kicillof fue ministro de Economía de la Nación y cumplirá 8 años de gobernador bonaerense, y hoy hace cola para el 2027.
Si hay algo que identifica a la provincia de Buenos Aires es su color político. En 1983 el PJ se encontró con el “accidente de la democracia”, pero a partir de 1987 dominan el territorio hasta la fecha. Sólo acumuló deudas en el territorio donde se ganan las elecciones.
Atrasa la policía, atrasa IOMA, la red vial está en emergencia, la justicia funciona como un delivery y el Banco de la Provincia es utilizado como instrumento financiera de la provincia.
Por su parte, como en la actualidad, la mayoría automática de la MGP, ha acompañado este proceso con los ex intendentes que se han manejado según el tramo de expresión de los marplatenses en las urnas. El actual intendente Montenegro llegó para el colapso. Ya agotó sus recursos hasta el 2027 y la vio.
Recurre al espacio de los privados y “trabaja” en esas soluciones. Bachea con sobretasa a la carga de combustible que pagan todos los marplatenses y turistas. Hizo una ciclovía que es su única obra pública con recursos propios en modo CABA. Es tan emblemática cómo es inútil e inservible.
Arrancan con la novedad de la asociación pública y privada, no debe perderse de vista como se accede a esos contratos, con el criterio que se adjudican y cómo se han favorecido el club de empresas del mismo grupo económico. Se están transfiriendo fondos a empresas ajenas a la jurisdicción de General Pueyrredon. Y hay funcionarios y legisladores extraños a la misma. La familia Moyano es local, pero a muchos les viene bien.
El caso de la 515 y la Avenida Jorge Newbery, son el ejemplo incontrastable de la morosidad de la política y del oportunismo con el que juegan según los tiempos. Hoy es COTO, es la tabla de salvación a la inoperancia y a la ineficiencia. Por ejemplo, el boom de la zona tomó visibilidad y se ha encapsulado el problema.
No es ninguna novedad, como que crecen los casos de inseguridad ciudadana y vial. No hay retroceso, el avance deteriora aún más el tejido familiar. Es como la inflación los índices que se acumularon son inalcanzables y dejó al 70 % de los argentinos de la indigencia para abajo. En este contexto se desenvuelve Mar del Plata. Lo que espanta es la falta de capacidad de reacción. Y que se mantenga la capacidad de engaño.
Jorge Newbery es una trampa mortal, barrios privados nuevos y en crecimiento, clubes deportivos de alta generación (tipo MLS), el complejo turístico más importante y completo de la ciudad, haras deportivos etc. Son sólo 6 kilómetros, desde Mario Bravo a la 515, pero que no adquieren la importancia de la judicialización de la administración de Punta Mogotes o la Rambla, por citar sólo 2 ejemplos, con dividendos políticos.
El oficialismo y la oposición acuerdan rápidamente, o negocian votos, logran sus mayorías propias circunstanciales, (totales o parciales) que sirven por ejemplo para designar ciudadano ilustre a un vacunado vip, construir vía excepciones y compensaciones de envergaduras multimillonarias, sostener durante años a jefes de policía del Departamento Central, de Narco criminalidad y Dirección de Investigaciones.
No hay inocentes. Hay una clase política culpable y responsable de la involución social y económica que arrastra Mar del Plata, ideal para tomarse fotos hacer couching y probarse trajes de candidato a algo. Es hora de hacer y ayer ya fue tarde.
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