Los finales ya parecen guionados. Pierde, por un tanto o más, pero concluye con un triunfo de local. Esta vez, la historia se pareció mucho a la del último partido con Rivadavia de Lincoln: dos goles en desventaja e involucrado en un terreno muy complicado. Sin embargo, Alvarado sacó a relucir el “plus” que lo caracteriza en su casa, reviritó el resultado y empezó con el pie derecho en la Copa Argentina. En definitiva, fue 3 a 2 el triunfo sobre Sol de Mayo, del Argentino B, y el invicto a salvo.
Blanco y Valdebenito fueron los goleadores del visitante mientras que Malán, Valente y Castillo le otorgaron la clasificación al elenco marplatense.
El inicio no expuso la diferencia de categoría. El conjunto rionegrino no salió a especular, por el contrario, saltó decidido al campo de juego a plantearle las acciones de igual a igual. Con sus limitaciones físicas pero con mucha actitud.
En defensa y mediocampo, el “Torito” dispuso dos líneas bien definidas. La apuesta fue la clara salida por los costados. Con Ischia como puntal en la izquierda junto a Centurión, y las proyecciones de Valente. Arriba, Castillo y Malán.
A los 12′ el ex Defensa y Justicia ganó en velocidad y cedió al centro. El uruguayo, a dos metros del arco, no estuvo preciso y se perdió una gran oportunidad.
Y a los 20′, sucedió lo menos pensado. El centro cayó desde la derecha enviado por Emanuel González, Luquet se la pasó a Blanco, y el defensor aprovechó para poner el 1 a 0.
Asombro y preocupación en el local. Porque los dirigidos por Valdebenito sumaron mucha gente en ataque y capitalizaron las fallas defensivas.
Entonces, de a poquito la sorpresa fue cobrando realidad. Y Sol de Mayo atacó de nuevo. Un pase en profundidad bien preciso dejó mano a mano a Luquet, que se topó con la humanidad de Evangelisti. Así, la supremacía la estableció levemente el equipo sureño.
Y a los 37′, otra vez el mediocampista rival terminó en posición de delantero. El tiro fue rasante y Evangelisti sacó con las piernas.
Los últimos cinco minutos de la primera etapa fueron un aluvión de Alvarado. Envíos aéreos y cabezazos como vías de ataque. Bocchino, tras tiro libre de Centurión, tuvo el empate a los 42′ y Astutti respodió bien para evitarlo. Un par de llegadas aisladas más hicieron pasar zozobra al visitante.
Para el complemento, ingresó Ezequiel Ceballos con el objetivo de aumentar el caudal de juego. El equipo del ex barrio Matadero quedó con tres en el fondo y el “trapo” bien adelante.
Y enseguida…otro golpe de nocaut. A los 2′, un exquisito pase vertical entre líneas evidenció las falencias de la zaga central. Apareció Valdebenito cara a cara con Evangelisti y amplió diferencias.
A partir de ahí, le costó muchísimo al “Torito” doblegar a su oponente. Más allá de algunos atisbos en ofensiva, recién a los 22′ pudo quebrar la resistencia. Malán, de “palomita”, puso el descuento.
Minutos después, el extranjero tuvo el empate y Astutti mandó el balón al córner. Con Cortadi y Cayumán ingresados, Alvarado quemó las naves. Estos dos se sumaron a Castillo, Malán, Ceballos, Valente y Centurión.
Sol de Mayo se replegó y utilizó el pelotazo para el contraataque con un solo hombre: Abbate.
El contexto para las avanzadas del local no fue el mejor. El conjunto rionegrino intentó ensuciar el juego y desestabilizar el trámite con cuestiones extrafutbolísticas.
A pesar de todo, el tesón y la buena distribución en la línea de atacantes dio rédito. A los 38′ Malán agarró la lanza y abrió el juego para Cortadi. Este mandó el esférico por lo bajo y Valente, entrado en velocidad, decretó el empate.
El envión lo llevó por más. Pierna fuerte, fricción y clima picante fueron algunos de los condimentos sobre el final de la tarde. Primero Centurión probó de afuera y en dos tiempos controló Astutti. Y a los 47′, el exVelez Sarsfield atacó y buscó la misma vía. Desde el sector derecho el pibe surgido del club no fue egoísta, metió el pase al medio y Castillo apareció para la victoria.
Otra vez el desarrollo de arranque fue similar. Abajo en el marcador y rodeado de inseguridades. Pero, la localía parece indestructible. Surgió el plus, el extra de Alvarado en Mar del Plata. Con confianza, ímpetu y ganas en los 25′ finales, consiguió el premio mayor.
Sintesis:
Alvarado (3): Leandro Evangelisti; Nicolás Colaneri, Emanuel Bocchino, Facundo Gómez y Junior Ischia; Gastón Valente, Gabriel Christovao, Darío Ferreira y Emanuel Centurión; Fabián Castillo y Gonzalo Malán. DT: Gustavo Noto
Sol de Mayo (2): Nahuel Astutti; Gastón García, Maximiliano Blanco, Leonardo Delgado y Gastón Abdala; Carlo Piñero Da Silva, Iván Luquet, Jorge Lencina y Emanuel González; Fernando Valdebenito y Emerson Abbate. DT: Adan Valdebenito.
Goles: en el primer tiempo, a los 20′ M.Blanco, en el segundo tiempo, 2′ F.Valdebenito, 22′ Malán, 38′ Valente y 47′ Castillo.
Cambios: en el segundo tiempo, en el inicio, E.Ceballos por N.Colaneri, 5′ M.Sosa por G.García, 9’A.Fernández por Valdebenito, 15′ B.Cortadi por D.Ferreira, 29′ Cayumán por Ischia y 40′ Bisterfield por E.González.
Arbitro: Leopoldo Gorosito.
Estadio: José María Minella.
foto: Romina Roose