Lo que le importa a Libertad es haberle descontado tres unidades al puntero, habiendo superado a Unión de Mar del Plata por uno a cero. En un torneo tan corto, no hay demasiado tiempo como para analizar rendimientos sino mirar la tabla e intentar llegar al premio mayor que es terminar la rueda que arrancó hoy con ventaja sobre los demás.
Lo mejor del local estuvo en la mitad más cercana a Darío Sand, ese equilibrio defensivo y la posibilidad de mantener el cero en su arco, cimentando cualquier intención posterior.
La necesidad de vencer al puntero de la Zona lo motivaba e impulsaba hacia adelante, a veces con algo de fútbol, en otras ocasiones con más intención, fuerza y entrega.
El gol de Emiliano Torresi hizo que casi en un acto reflejo, las líneas aurinegras se fueran retrasando un poco, permitiendo que la visita generara cierta intranquilidad, potenciándose esto a partir de una expulsión generada por el árbitro Bruno Cocca, dejando a Libertad en inferioridad numérica.
Con el tiempo como aliado y con la particularidad de haber sufrido el sistema lumínico un apagón momentáneo, el partido siguió y los de Pancaldo supieron encontrarle la vuelta para no sufrir en demasía, quedarse con la victoria y acercarse a su rival, superando a la vez a Talleres que juega mañana y que puede ser puntero o bien quedar debajo.
Chivilcoy aparece en el horizonte aurinegro y para los marplatenses, ahora ya no invictos, queda una extraña sensación seguramente porque de estar cómodos en lo más alto, pueden llegar a ceder esa posición de privilegio en la semana venidera e incluso pasar a ser terceros, aunque para esa página de la historia falta aún bastante.
Fuente: sunchaleshoy.com.ar