En cuanto el Gobierno chino “libere” la exportación, Sinergium Biotech de la localidad bonaerense de Garín, está lista para terminar 20 millones de Sinopharm
La empresa Sinergium Biotech, especializada en la producción de vacunas en su planta bonaerense de Garín, está lista para terminar 20 millones de dosis de la inoculación china de Sinopharm. Todo depende de que la empresa del Estado chino disponga del antígeno congelado y consiga la autorización para enviarlo a Argentina.
Sinergium es el mayor productor de vacunas del país. Fabrica la vacuna contra la gripe que actualmente compra la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para distribuir en distintos países de la región. También produce para Pfizer la vacuna contra la neumonía y para Merck la vacuna contra el cáncer de cuello de útero. La planta de Garín está en condiciones de hacer lo que llaman fill-finish, es decir las tareas finales: descongelar, filtrar, formular, envasar, hacer los controles de calidad y distribuir.
El antecedente más importante de la nueva negociación es que Sinopharm realizó parte de la fase III de su vacuna en la Argentina, en en la Fundación Huésped, que lidera el doctor Pedro Cahn. Participaron en el proceso 4.000 voluntarios; a 2.000 se les aplicó la vacuna y a 2.000 el placebo. En ese trabajo también se sumó Sinergium, que presentó todas las conclusiones en la Anmat. Allí se terminó gestionando la autorización definitiva de la vacuna en la Argentina.
Ahora, en Sinergium esperan que Sinopharm dé el próximo paso. El gigante estatal tiene 128.000 empleados, hospitales y farmacias. Se dice que su valor es de 20.000 millones de dólares. El problema es que el Gobierno chino está prohibiendo la exportación de vacunas para privilegiar la aplicación a los ciudadanos de ese país: el Partido Comunista Chino celebra sus 100 años el 1º de julio y pretende tener inmunizados para esa fecha a 520 millones de chinos. Sin embargo, podría haber una ventana en la exportación solo del elemento activo.
Del lado de Sinergium, cuyos accionistas son Sebastián y Juan Carlos Bagó; Daniel y Carlos Sielecki, Luis Alberto Gold y Hugo Sigman, están listos para el acuerdo y dicen que están en condiciones de procesar el elemento activo congelado ni bien llegue. En pocos meses podría terminar unos 20 millones de vacunas, pero para eso se requiere el visto bueno de la parte china.