“Tengo gran expectativa de que Facundo (Manes) no sólo haga una buena elección, sino que también gane las PASO”, dijo hace pocos días atrás Gerardo Morales, en una entrevista con LA NACION. Si bien el deseo del referente radical y gobernador de Jujuy no se cumplió, el neurocientífico y precandidato a diputado por la provincia de Buenos Aires lleva ganados alrededor de 15 puntos de la interna, contra los casi 23 que marca su contrincante, el alfil larretista Diego Santilli. Entre los dos, suman 38 puntos a Juntos y unidos superan al oficialismo.
Al salir a reconocer su derrota en La Plata, en el búnker de Juntos, Manes dijo, frente a Santilli: “Ambos estamos de acuerdo con el trazado grueso de la República, pero tenemos identidades diferentes”. Pero advirtió, con optimismo: “Vamos a trabajar juntos con Diego para ganar en noviembre y en 2023 porque no podemos enfrentar el país con las prácticas de siempre y fórmulas de siempre”.
Manes le hizo honor al nombre de su espacio. “Dio el paso” por la Unión Cívica Radical (UCR) en la provincia de Buenos Aires, y con los votos conseguidos ayuda al partido a mantener en alto su voz en la mesa de discusión de Juntos por el Cambio (JxC). “Un mes más y ganaba”, arriesgan en el entorno de Morales, conformes con el resultado bonaerense.
El logro se apalanca por los resultados favorables en Jujuy, Corrientes y Mendoza, en donde se ratifica el predominio rojo y blanco, y por la sorpresa en Córdoba, donde la interna radical tracciona la lista de JxC para posicionarla 20 puntos por encima de la propuesta oficialista de Juan Schiaretti.
Las disputas radicales, que buscan retar el liderazgo de JxC a nivel nacional, tienen además, como telón de fondo, la puja de poder entre Morales y el senador Martín Lousteau, quienes intentan suceder a Alfredo Cornejo en la presidencia nacional de la UCR. Bajo este contexto, sorprenden algunos resultados como el de Córdoba, que marca un amplio predominio de Luis Juez –apoyado por Patricia Bullrich– y Rodrigo De Loredo –la joven apuesta de Lousteau–, por sobre la propuesta de la vieja guardia, que contaba con consagrar a Mario Negri como senador.
En Jujuy, el espacio oficialista Cambia Jujuy, liderado por Gustavo “Bacha” Bouhid saca una diferencia de 20 puntos al Frente de Todos, con casi el 97% de las mesas escrutadas. Morales ya había resultado victorioso por el mismo margen en junio, en las legislativas de la provincia.
En Corrientes, donde el gobernador Gustavo Valdés consiguió su reelección el mes pasado con un exultante 76,9%, la lista Verde radical también supera el 75% de los votos, con un 99,7% de las mesas escrutadas, y la oposición consigue el apoyo de alrededor del 60% del electorado.
Mendoza también resultó como se esperaba. El oficialismo local lidera por 20 puntos la disputa de diputados y senadores, bajo el ala del gobernador radical Rodolfo Suárez, y con el 89% de los conteos hechos.
En Córdoba, aunque ya se preveía que el radicalismo le concediera el triunfo a la oposición, los resultados sorprendieron. En la disputa por el Senado, aún sin conocerse los datos, el diputado Mario Negri (Juntos por Córdoba), referente del tradicional Morales y precandidato preferido del expresidente Mauricio Macri, ya había adelantado su derrota ante Luis Juez, la apuesta de la exministra de Seguridad Patricia Bullrich.
Santa Fe también sorprende. Otro precandidato a senador ungido por Lousteau, Maximiliano Pullaro, le pisa los talones de los 30 puntos a la outsider conductora de TV Carolina Losada, que lleva como precandidato a diputado al ex intendente de Santa Fe, Mario Barletta. Ambos dejan atrás por casi 10 puntos a la figura de Pro, Federico Angelini.
Los resultados preliminares dejan muy bien parado a Lousteau, quien se atribuye más de una victoria. “Estamos muy contentos con la gran apuesta que hicimos, por tres cosas, hasta ahora. La figura de [Martín] Tetaz, que aportó mucha frescura a la candidatura de [María Eugenia] Vidal, el resultado del radicalismo en la provincia de Buenos Aires, y el triunfo en Córdoba, donde impulsamos una fuerte renovación partidaria. Santa Fe está por verse”, indicaron en el entorno del senador. Y agregaron: “Hay un radicalismo que es el tradicional, anquilosado, y otro partido que emerge, más atractivo”.
Probablemente el mayor golpe para la UCR tradicional fue el de Adolfo Rubinstein, la propuesta disidente porteña que respaldaron Morales y los viejos caciques, en repudio a la alianza de Lousteau con el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Con el 95% de las mesas escrutadas, el ex ministro de Salud de la Nación no llega a los ocho puntos en la interna de JxC en la Ciudad.
Adelante radicales!!!!