La historia tumultuosa de la vida política de Abad, lo encuentra con su dieta disminuida, congelada y próxima a llegar a los $ 10.000.000.- cuando en el senado destraben sus ingresos. No es para pasarla mal pero no está saliendo cómodo en las fotos.
Desde su banca aparece junto a sus asesores, algunos de Mar del Plata, activándose en redes sociales con temas como la pesca, la actualidad de instituciones deportivas, el IOMA, la inseguridad, problemas que ahora captan en sus radares en la línea de cabotaje en General Pueyrredon.
Su fatiga hasta la observan en cuentas de instagram, donde recuerdan que además de haber tenido 3 años cerrado su comité (en un caso inédito) de la UCR de Mar del Plata, siendo presidente del máximo órgano partidario bonaerense, también deja en ciernes acéfala la conducción provincial en un cierre con un sello irreversible.
El fracaso de su gestión política, deja complicada su referencia. Acuerdos con Kicillof, promesas a Milei, hizo uso de la generosa democracia de la cual continuará sirviéndose. ¿Cuál será el valor de su voto y de sus exposiciones en la Cámara Alta? Difícil de dimensionar, aunque casi ni funcionan existen los tribunales de ética y conducta partidaria.
No obstante, parece que ya por lo menos le han tomado la patente. No ha pasado desapercibido y fue votado por un período de seis años. Por su caudal de votos bonaerenses, Patricia Bullrich lo premió en la Cámara Alta de la Nación. La actualidad indica un idilio político hacia La Libertad Avanza, cada vez más intrascendente y atado a una suerte imprevisible.