El diario La Capital y la radio LT8, que integran el inmenso ecosistema de medios que controla el empresario Gustavo Scaglione, arrastra hace meses una crisis de magnitud que derivó en el pedido a la Secretaría de Trabajo nacional de la apertura de un procedimiento preventivo de crisis y un plan de retiros voluntarios.
En medio de las negociaciones para el procedimiento, desde el Sindicato de Prensa de Rosario -SPR- afirmaron que la empresa anunció el despido de 40 trabajadores entre el diario y la radio, según la notificación que recibieron.
En diálogo con LPO, el titular del grupo negó esa cifra; “sería imposible echar a 40 empleados”, dijo Scaglione y aclaró que se trata de diez o quince trabajadores que no cumplen funciones periodísticas ni impactan en el funcionamiento de los medios.
“Son algunos administrativos, de seguridad y puestos que con la reconversión digital dejaron de tener funciones”, explicó el empresario y agregó que son 40 trabajadores en todo el grupo que comprende a medios de Tucumán, Salta, Entre Ríos y Santa Fe, entre otros.
Según el empresario, la apertura de los retiros voluntarios al cual se adhirieron 32 trabajadores alivió la situación de los medios “y ahora necesitamos hacer un pequeño ajuste con estos 10 o 15 puestos”.
El problema, dicen en la redacción, es que se fueron periodistas de mucho prestigio, editores y firmas importantes mientras que los que pretendían los dueños de la empresa no lo hicieron. “Por eso hace tiempo que pedimos el procedimiento preventivo”, dijo Scaglione.
Por ello, esta semana está prevista una reunión en el ex Ministerio de Trabajo de la Nación, degradado a Secretaría, en donde el Grupo Televisión Litoral deberá entregar el balance de los últimos seis mese y demostrar que la empresa se encuentra en situación delicada por condiciones externas y no por mal manejo administrativo.
Además, en el gremio afirman que Scaglione presiona para una rebaja salarial y pérdida de derechos descontando antigüedad y otros plus que conforman los sueldos que de por sí, vienen a la baja por la pérdida del valor adquisitivo.