El juez marplatense Pedro Federico Hooft fue citado a declarar por el Fiscal Federal, Claudio Kishimoto, por su participación en la última dictadura militar donde habría sido responsable de no darle curso a los Hábeas Corpus presentados por las víctimas de aquella época, entre otras cuestiones.
Según se d
io a conocer, el fiscal actuante estaría motivado por la cantidad de testimonios de sobrevivientes de aquella época que lo mencionan como uno de los responsables de los secuestros, torturas y asesinatos de militantes políticos.
En la denominada “causa Molina”, varios testigos nombraron al entonces juez en lo criminal y correccional N° 3 del Departamento Judicial de Mar del Plata, como autor y partícipe de varios hechos.
El fiscal Kishimoto lo acusa por 20 casos en total y además de esos graves delitos, se lo indagaría por “incumplimiento de deberes como funcionario público“, “omisión de promover la persecución y represión de delincuentes” y por “sustracción de medios de prueba“, por la cantidad de expedientes que desaparecían en ese entonces, en el área donde él desarrollaba su trabajo.
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