Categórica y con propuestas, la concejal Cristina Coria abordó sin concesiones las gruesas fallas que se han observado en materia turística. Lo hizo ante la deserción del presidente de la Comisión de Turismo del Frente Renovador, Lucas Fiorini, quien eludió la requisitoria de mdphoy.com , como responsable de una de las áreas productivas más importantes de la ciudad, invitado a formular sus apreciaciones sobre la última temporada.
No en vano la contadora pública nacional, es una referente excluyente de los principales operadores turísticos de la ciudad y del país a la hora de evaluar la actividad, por ello sus definiciones cobran especial importancia frente a la reciente finalización de la temporada alta, a la que no casualmente, le faltaron balances serios y profundos.
A continuación las respuestas brindadas a nuestro cuestionario en relación a la temporada alta 2013/14, y fundamentalmente, a la actuación del EMTUR.
¿Merecen alguna observación las estadísticas, que se brindan en función de la afluencia turística en temporada alta? Este método del “cuentaganado”, ¿es un sistema adecuado para medir los resultados de una actividad clave para el desenvolvimiento de la ciudad?
Si los datos “estadísticos” que exhiben con alegría fingida, los funcionarios del Emtur en los últimos años referidos a la temporada alta, fueran ciertos, no habría estructura de servicios capaz de sostenerla. Y la realidad muestra otra cosa: la cuentan hoteleros, gastronómicos, taxistas, acomodadores y cualquier vecino con algunos años en la ciudad.
Igual, creo que el problema va más allá de aparentar contar gente. Debemos analizar cuántos vienen, cuánto permanecen y cuánto gastan y recién ahí se pueden analizar los datos, sacar conclusiones y trabajar para reposicionar a la ciudad.
Creo que en esto el Emtur ha dejado de ser proactivo, no lo veo buscando los diferentes nichos turísticos, ni trabajando con el sector privado como debería para generar nuevas ofertas. Me da la sensación de que, a pesar de contar con un equipo profesional y de trabajo muy comprometido y formado, los funcionarios se han quedado en la instalación del nuevo logo, del nuevo nombre y de la impronta de la agencia de publicidad. Nada más, desperdiciando así el potencial del Ente como motor de una política turística que involucre a todos los actores.
La ciudad ofrece más allá de sus encantos naturales, otro tipo de elección que exigen los turistas: seguridad, orden, limpieza, tranquilidad, tránsito, estacionamiento etc?
Nuestra ciudad es bellísima y asombra a todos quienes la conocen, por su extensa costa de diferentes paisajes, sus barrios residenciales, su infraestructura turística, el cordón verde, las sierras o las canteras. Es magnífica para visitarla o vivirla, pero obviamente la inseguridad, el caos del tránsito o la falta de limpieza y mantenimiento de los espacios públicos alejan al potencial turista. También se lo aleja al complicar su estadía con normas confusas para el estacionamiento o con dificultades para obtener o cargar la tarjeta del colectivo. Al turista hay que simplificarle la permanencia y el acceso a la información local.
Entiende que Mar del Plata ha perdido mercado frente a otras ciudades balnearias, que han crecido, además del litoral mesopotámico, sierras de Córdoba y Tandil, entre otras?
Frente a la gran oferta turística, Mar del Plata debe salir a competir día a día con destinos vecinos, nacionales y del resto del mundo, que antes no existían en el imaginario del turista tradicional. Hoy, quien desea viajar está a un click de la información, y los avances en el transporte hacia otros destinos han hecho el resto.
Por eso, es central fortalecer la marca ciudad en internet y a su vez, mejorar la conectividad aérea, la frecuencia y estado de los trenes y el estado de las rutas. Es inconcebible que aún tengamos rutas como la 88 o la 11 en algunos tramos, que parecen una invitación al accidente o que para llegar en avión desde la mayor parte del país, haya que pasar por Buenos Aires. Creo que ha faltado gestión para solucionar estos temas tan importantes.
Tiene alguna reflexión para hacer, frente a la actividad teatral de la temporada alta, que cae temporada tras temporada, según coinciden los propios protagonistas.
Sí, por supuesto y creo que hay una combinación de factores. Por un lado, quizá el sector deba repensar sus pretensiones, conscientes de que la gente cada vez cuenta con menor poder adquisitivo. Por otro, el Gobierno Provincial ha financiado una enorme cantidad de espectáculos en escenarios al aire libre o subsidiado otros en las salas provinciales, lo que generó una gran oferta artística gratuita para la gente (aunque muy cara para los contribuyentes). Frente a lo gratis, es difícil competir.
¿Es sustentable la explotación turística sin rentabilidad? ¿Quién está en condiciones de invertir sin poder recuperar el capital de trabajo? Así se desalienta la plaza y no hay renovación de expectativas.
Obviamente las empresas privadas necesitan ser rentables para mantenerse en el tiempo y la voracidad fiscal creciente ha ido disminuyendo esa rentabilidad. El sector plantea con números en mano, que es cada vez más difícil mantener el capital y la mano de obra ocupada. Por eso, estoy convencida de que el Municipio debe atender esta cuestión, ya que lo peor que puede ocurrirle a la ciudad es que sus negocios comiencen a abrir sólo los fines de semana o en temporada alta.
En tal sentido, hemos presentado esta semana un proyecto de régimen promocional para el sector turístico, premiando al que permanece con sus puertas abiertas todo el año, manteniendo al personal y al que invierte para ampliar su capacidad o mejorar la calidad y accesibilidad”
¿Cómo evalúa la gestión del EMTUR en este contexto general?
Creo que de alguna manera lo he ido planteando. Me parece insuficiente en su articulación con el sector privado y falta de convicciones para exigir lo que la ciudad necesita de parte de la Provincia y la Nación.
Conceptos coherentes e inteligentes que demuestran conocimiento de lo hablado.
Gracias Miguel por el comentario.