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Grupo Renaciendo MdP por la humanización del parto

“Luz fue víctima de dos cesáreas innecesarias hace varios años. Hoy ha elegido transitar su parto vaginal en el nacimiento de su tercer hijo. Ella no cuenta con cobertura de salud y se atiende en el Materno Infantil. Esta en la semana 40 de su embarazo, en fecha probable para la llegada de su hijo. Sin embargo, lejos de estar esperándolo en calma, en paz y conectada con su hijo, con amor y en familia, se encuentra en medio de una lucha por sus derechos a decidir como, donde y con quien parir. Está peleando porque su decisión se respetado y se la acompañe sin intervenciones médicas innecesarias. La lucha esta en un estadio legal pero no queda tiempo, su hijo puede llegar en cualquier momento” dicen desde esa organización.

Los partos vaginales después de una o dos cesárea son comunes en otros países, en la Argentina así como en nuestra ciudad. Hay evidencia científica al respecto. Para ello debemos encontrarnos con un equipo obstétrico respetuoso de las decisiones de las mujeres que deciden protagonizar el nacimiento de sus hijos demandando a los médicos asistencia y no la apropiación de un momento personal, de una de las experiencias más enriquecedoras de la vida de una mujer.
La ley 25.929 “Derecho de los padres e hijos durante el proceso del nacimiento” contempla:
-Que la mujer tiene derecho a estar acompañada por la persona que ella desee durante el trabajo de parto, parto y posparto sea parto vaginal o por cesárea.

-Que se espere a que el parto se desencadene solo sin acelerar el proceso con maniobras y medicación, en el caso que no se tenga evidencia de sufrimiento fetal y/o materno.

Cuestiones que aun hoy no se cumplen en diversos lugares de la ciudad de Mar del Plata.

Estudios locales nos indican que sólo el 12% de las mujeres en edad fértil conocen la ley de parto humanizado que las ampara.

La falta de información nos deja sin alternativas, no nos permite apropiarnos de nuestros derechos. Quien no conoce sus derechos no puede reclamarlos.

Podemos parir, podemos protagonizar el nacimiento de nuestros hijos. Nuestro cuerpo debe ser respetado. Tenemos derechos!

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