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Gestión Montenegro: El basural a cielo abierto es un plan que sumará la recolección de residuos

 

La bomba ambiental que se viene. Nadie sabe qué está pasando en el predio de disposición final de residuos. Esta es mala prensa para el ejecutivo local que pueden recorger los medios de CABA de tirada nacional que cubren con enviados especiales la temporada de verano. Ahí apuestan fichas también y no son las del Casino Central.

Una decisión judicial dejó desacomodado al EMSUR y al intendente Guillermo Montenegro. De un golpe quedó en abstracto una licitación pública convocada cuya apertura no se produjo, dando lugar a una situación desconocida aún para quienes tienen extenso rodaje en la materia.

También dejó en abstracto el pliego aprobado por el Concejo Deliberante que deberá volver a ser tratado y aprobado, dejó en abstracto el estado de emergencia en el cual se desenvuelve el servicio y diligencia los pagos (no es un detalle menor).

Y se desconoce cómo será la continuidad del servicio, aunque se descuenta que CIAGESER y sus adláteres continúa siendo el caballo del comisario a través del direccionamiento que dio lugar a la decisión judicial del Contencioso Administrativo.

Hay cuestiones ambientales, económicas, administrativas y políticas, que vuelve muy denso el expediente que contiene este servicio y hoy es una verdadera bomba ambiental, es decir que hemos retrocedido 4 décadas en materia de prestación.

Hay que ponerle onda a la gestión de Horacio Rodríguez Larreta en CABA y trasladar toda su metodología de trabajo que arrastra en varios ítems precisamente detectados. Las grúas por ejemplo y la relación entre comitente y contratista, que obligó a licenciarse al Ministro de Justicia y Seguridad, Marcelo D ´Alessandro, la semana anterior. Montenegro hizo la cuna de ese ministerio durante la gestión del PRO en el 2007.

Montenegro es muy ducho en este expertise, así que calificar de intromisión a la justicia es un juego de niños y da confianza a sus funcionarios, para avanzar en una administración paralela por la que debería regirse la Municipalidad de General Pueyrredon. Desde el enduro en el Acceso Norte hasta las fotomultas, se dirimen como en un calco que son el sello de la gestión.

Y el modo CABA podría convertirse por afinidad con el modo Necochea, ya que próximamente vencerá la concesión de la recolección de residuos y daría un lugar a un paquete para su aprobación siempre hay radicales, lilitos, un Lauría o un Taccone para hacer de alfombra política del PRO. ¿Me siguen diría Carrió?

¿Recolección y tratamiento de la disposición final podrían tratarse juntos o sería una versión de licitaciones acollaradas? En el expediente de las fotomultas desapareció un folio, dentro de la transparencia que hace gala la presidente Marina Sánchez Herrero, re jugada con Montenegro. Su doble voto siempre a mano brinda inmunidad política a un departamento ejecutivo, que se muestra lento, ineficiente e inoperante, desde su intendente para abajo.

No se sabe, si está bien o está mal, pero el mecanismo se consolida y goza aparentemente de muy buena salud, según los que leen encuestas serias. En materia de recaudación todo es posible, las vías son infinitas y evidentemente es una especialidad de la casa. Todo sea por los recursos, es una campaña larga.

Subir tasas 73 % en 2023, cuando la inflación anual 2022, está orillando los tres dígitos, es una cuestión de magia. Mucha contabilidad creativa y presupuestos tensos. Todo con Montenegro en un proceso de definir si irá por la reelección, es decir que puede tener once meses de turbulencias de máximo rigor.

Jorge Elías Gómez

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