Nancy Todoroff, secretaria general de la Unión de Trabajadores Hoteleros Gastronómicos de la localidad balnearia, dijo que recorrió personalmente diferentes sectores de la ciudad durante las tardes y las noches y se vio mucho movimiento.
“Superó las expectativas de todos realmente. Recorrí personalmente diferentes sectores de la ciudad durante las tardes y las noches y se vio mucho movimiento”, aseguró Nancy Todoroff, secretaria general de la Unión de Trabajadores Hoteleros Gastronómicos de la localidad balnearia.
Todoroff destacó el nivel de actividad en las zonas de las calles Alem y Güemes, así como en los locales de la avenida Constitución y del Centro, “sobre todo en las cervecerías, que son las que más gente convocan desde que se abrieron”.
En ese sentido, explicó que desde la entidad se sumaron al control del cumplimiento de los protocolos en el marco de la pandemia del coronavirus “para proteger” a los clientes y a los trabajadores.
“Si bien hubo algunos casos en los que se tuvo que dialogar para que se reforzaran, en un nivel altísimo se cumplieron todos los protocolos. Una de las postales de estos días fueron las largas colas, debido también a que los establecimientos trabajan a capacidad reducida en su interior”, señaló Todoroff.
Mariano Lanz, responsable del bar Gula, ubicado en la zona de Güemes, y de la confitería Adorado, en el Centro marplatense, coincidió en que “hubo muy buen movimiento, con mucha afluencia de gente y con buen nivel de consumo por grupo”.
“Teníamos muchas expectativa y a su vez sabíamos que era un desafío que todo saliera bien, con la aplicación de los cuidados y el distanciamiento social, y la verdad es que no solo fue un gran respiro para el sector, sino que además nos hace pensar en que vamos a tener una muy buena temporada”, señaló Lanz en diálogo con Télam.
Juan Esteban Echeverry, encargado de las cervecerías Cheverry, destacó que “se trabajó muy bien” y que en lugares como la zona comercial de la calle Güemes, “en todos los locales, incluso en las pizzerías, se vieron colas de gente”.
En cuanto a los protocolos y cuidados, señaló que “se cumplieron bien, aunque en muchos casos hay que recordarle a la gente el uso de barbijos cuando dejan las mesas”, al indicar que no lo hacen por por “mala intención sino por descuido”.
El Municipio de General Pueyrredón, que estimó preliminarmente que 100.000 personas llegaron a la ciudad entre turistas y propietarios no residentes, informó además que desde el próximo viernes 11, comenzarán a montarse corredores gastronómicos a cielo abierto en las calles Belgrano y Córdoba, como respuesta a la dificultad de los comercios para atender a los clientes dentro de los locales.
El titular de Desarrollo Productivo e Innovación local, Fernando Muro, explicó que se buscará “maximizar el espacio de cada local”, por lo que la calle “permanecerá cerrada a partir de las 18 y hasta las 3”, y a su vez el corredor “quedará habilitado al tránsito normal durante el día, pero con calzada reducida”.