Mar del Plata, como muchas otras ciudades del país, ratificó con su masiva manifestación que la memoria histórica sigue viva en cada rincón de la sociedad. A 49 años del golpe, la lucha por la verdad, la justicia y la reparación continúa siendo un derecho irrenunciable para todos los argentinos.
Este lunes 24 de marzo, en el marco del Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia, miles de marplatenses se congregaron en una imponente marcha para conmemorar el 49º aniversario del último golpe militar en Argentina. La manifestación, que recorrió las principales calles del centro de la ciudad, reflejó el fuerte compromiso de la sociedad en mantener viva la memoria de aquellos años oscuros de la historia del país.
La movilización, que comenzó a las 15:30, partió desde la Avenida Luro y se extendió por varias cuadras a lo largo de las principales arterias. La misma incluirá las calles Buenos Aires, Colón e Independencia, hasta finalizar en San Luis, donde los participantes se reunirán para cerrar el acto.
El lema que encabezó la manifestación fue claro: “La memoria no se apaga”, un mensaje que resuena con fuerza cada 24 de marzo, en el que se recuerda el inicio del autodenominado “Proceso de Reorganización Nacional”, la dictadura cívico-militar que gobernó el país entre 1976 y 1983.
La marcha estuvo marcada por una gran cantidad de banderas, pancartas y consignas que reflejaron el sentimiento de los asistentes. Entre las más destacadas, se vieron las emblemáticas banderas de las Abuelas de Plaza de Mayo, así como una gran bandera multicolor con el número 30.000, que representa a los desaparecidos durante la dictadura.
Además, algunos participantes mostraron pancartas con mensajes como “La Libertad y Revolución son nuestras”, “Fuera gobierno estafador” y “Milei basura, vos sos la dictadura”, expresando su repudio a las políticas del actual gobierno.
También se destacó una bandera argentina con fotografías de los desaparecidos, recordando a aquellos que no pudieron regresar a sus hogares. El mensaje en las pancartas fue unánime: “Fueron 30.000”, en referencia a las víctimas del terrorismo de Estado, un número que se convirtió en símbolo de lucha por la justicia y la memoria en todo el país.
Los manifestantes, entre ellos muchos jóvenes, demostraron su compromiso con la memoria histórica, y exigieron justicia por los crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura. La marcha fue también un recordatorio de las luchas que aún persisten para encontrar la verdad y garantizar que esos hechos no se repitan.
Alrededor de miles de personas de todas las edades se unieron a la convocatoria en repudio hacia la dictadura y el deseo de justicia. La jornada transcurrió de manera pacífica, con la única intención de recordar, honrar a las víctimas y seguir luchando por la justicia social.