El Defensor de la Tercera Edad Eugenio Semino pidió ayer al Gobierno que otorgue, a partir de diciembre,un reajuste de $ 900 a 5,9 millones de los jubilados y pensionados nacionales y a 1,4 millón de pensiones asistenciales o no contributivas.
Según Semino, el objetivo es llevar el haber mínimo mensual, que cobra el 75% de los jubilados y que hoy es de un poco más de $ 2.400 por mes, a $ 3.300 que es el valor del salario mínimo, vital y móvil. En tanto, las pensiones no contributivas rondan los $ 1.700 mensuales que pasarían así a $ 2.600 por mes. Y la Ley de Contrato de Trabajo define como al salario mínimo “como la menor remuneración que debe percibir en efectivo el trabajador sin cargas de familia, de modo que le asegure alimentación adecuada, vivienda digna, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento y previsión”.
Semino recordó que la canasta del jubilado, en la medición del mes de mayo incluyendo gastos como de alimentación, vivienda, medicación superaba los $ 4.300 mensuales.
Además, según Semino, “dicho reclamo es consonante con el de las Organizaciones del sector tales como la Mesa Coordinadora Nacional de Jubilados y pensionados, Jubilados de la Central de trabajadores de la Argentina CTA, Parlamentos de la Tercera de edad de la República Argentina, entre otras”.
Semino fundamentó su pedido en el rebrote inflacionario, en especial, la suba de los precios de los alimentos que castiga con más fuerza los sectores de menores ingresos. Los alimentos y los gastos de salud -que tuvieron una fuerte incremento en los últimos meses- son los que más inciden en la canasta de los jubilados.
También sostiene que el incremento de los haberes puede ser afrontado con el superávit de la ANSeS. El Presupuesto 2014 dice que la ANSeS tendrá un resultado positivo de $ 44.077 millones.