Con un elenco de notables, liderado por Vittorio Gassman, el director Valerio Zurlini dirigió en 1976 esta adaptación de El desierto de los tártaros, un crudo film que a la manera del western retrata las vivencias de un grupo de personajes enmarcados por su encierro en una fortaleza en pleno desierto. El film se verá hoy a las 18:30 en la Sala Nachman (Boulevard Marítimo 2280) dentro del ciclo El otro cine.
Como decíamos, además de Gassman el film cuenta con las actuaciones de Jacques Perrin, Giuliano Gemma, Philippe Noiret, Jean-Louis Trintignant, Max von Sydow, Fernando Rey, Francisco Rabal, y otros, en un verdadero seleccionado del cine europeo. Pero además se cuenta también con la música de Ennio Morricone, que realza el aspecto visual de la película.
En El desierto de los tártaros, miembros de un ejército de difícil filiación esperan a lo largo de los años un ataque de los tártaros. Están tácitamente encerrados en la fortaleza de Bastiano, una construcción rodeada por los restos de una ciudad destruida y calcárea que limita con el desierto. En ese sentido, Zurlini trabaja sobre el tiempo y el espacio, componentes básicos del cine.
Las grandiosas tomas del desierto, las montañas y la extraña ciudad abandonada, todo contrasta con el destino de los hombres. Personajes repletos de emociones reprimidas y confusión interior, integrados a un fuerte que es una metáfora de su prisión espiritual. La película es una fiel adaptación a una de las obras maestras de la literatura del siglo XX.