Emilio Bustamante muestra papeles y busca una carpeta del estante de su oficina, donde alguna vez funcionó la sala de reuniones del Consorcio Portuario. Cuando la encuentra, un bodoque de más de 100 páginas, la apoya sobre la mesa. Es una copia del trámite que hicieron para habilitar la Terminal como Depósito Fiscal.
El directivo cuenta que repitieron el procedimiento dos veces: 2006 y 2011. Que tenían hasta el seguro de caución, que todo estaba en orden, pero nunca los terminaron de habilitar desde la Dirección Regional de Aduana Bahía Blanca. Vinieron, inspeccionaron, despachos favorables, pero nunca la autorización definitiva.
“Dos veces el mismo recorrido –reitera el empresario-. No tenemos problema para hacer las reformas que ahora pide la nueva resolución de AFIP pero no vamos a invertir un peso hasta no tener la certeza de que salga”, avisa el director de la Terminal 2.
El restablecimiento del servicio de portacontenedores en el puerto de Mar del Plata ocurrió en febrero del 2015, con la llegada del “Henriette Schulte” de MSC. Pero al poco tiempo el servicio se canceló por falta de profundidad en el muelle de amarre. Se reanudó hace un año, luego que dragara la zona la Victory I, de Diosfer SRL. Ése es el disparador con que arranca la entrevista.
RP: ¿Qué balance hace de este año de servicio ininterrumpido de portacontenedores?
EB: Muy positivo porque hemos podido incrementar el nivel de carga y la frecuencia de los buques, lo que a su vez posibilita mayor actividad a los estibadores que conforman la UTE. Creo que hemos madurado como puerto. Se terminaron viejas divisiones y hoy todos entendemos que el portacontenedores genera trabajo para muchas familias y ofrece ventajas para los exportadores. Hemos mostrado rápidos reflejos para volver a la hoja de ruta luego del problema de calado el año pasado, lo mismo que para atraer a los poteros a que descarguen en Mar del Plata. Veo a una autoridad portuaria que conoce cuáles son los problemas que debemos resolver, nos tiene en cuenta y trabaja en ese mismo sentido para potenciar el desarrollo del puerto.
RP: ¿Cuál es el beneficio para la industria de que la Terminal sea depósito fiscal?
EB: Permitiría que el contenedor importado que bajamos el sábado del New York Trader pueda no solo bajarse, sino desconsolidarse en nuestras instalaciones. Eso no solo daría más trabajo a los estibadores. Permitiría que el contenedor no tuviese que ir al Aeropuerto para desconsolidar en Edcadassa, donde un inspector lo abre, mira que esté todo bien, lo cierra y se va. Es un camión circulando innecesariamente por la ciudad y costo de flete para el importador, cuando nosotros estamos a 20 metros del barco. Son cosas que tienen que invitar a la reflexión.
RP: ¿No se le dio mucha trascendencia a la importación de un solo contenedor?
EB- Es importantísimo. Tendrías que escuchar las cosas que en Buenos Aires se escuchan de este puerto. Barbaridades… Es bueno contar las cosas positivas que suceden. No hay conflictos desde hace muchos años. Puede haber diferencias pero se zanjan por los carriles normales. Tenemos un puerto operativo desde hace más de un año. Mar de Plata es un puerto que está en condiciones de seguir creciendo. Hemos presentado un proyecto de inversión en la Terminal 3 para consolidar este crecimiento en el movimiento de cargas. Pero faltan decisiones políticas que acompañen la potencialidad del puerto.
RP: ¿Cómo cuáles?
EB: Que haya estímulos para las empresas que exporten por su puerto más cercano. Eso permitiría que McCain cargue toda la producción de papa congelada que manda a Brasil por Mar del Plata. Son como 120 contenedores por semana. Un barco como estos que vienen, solo para llevar papa frita. Basta de que circule 3 mil kilómetros por ruta arriba de un camión o que salgan desde Buenos Aires. Pero McCain no lo hace por intereses dentro de la misma empresa. Me he reunido con directivos de MSC y me dicen que desde el área de Exportación en Balcarce les aclaran que no les conviene exportar por Mar del Plata. Eso me hace creer que hay intereses particulares de algunos intermediarios. Pero debería ser el Estado el que intervenga y les diga, señores, exporten por el puerto más cercano, supuestamente ése es uno de los motivos por los que se radicaron a 65 kilómetros de un puerto.
RP: ¿Y por qué no lo hacen?
EB: Acá hace falta que los directivos de las empresas se involucren en el tema. Es lo que pasó en Mar del Plata para poder recuperar el servicio de portacontenedores el año pasado. A las reuniones con MSC me acompañó Alberto Valastro. Él se sentó a la mesa y les dijo: “señores, si no cargo por Mar del Plata, no cargo más con ustedes”. Lo mismo hizo Moscuzza. Basta de salir por Buenos Aires, con intermediarios que van prendidos en la operatoria. Les agradecemos que hayan venido y está bien que quieran hacen su negocio pero si la dejan, la naviera manda todo por camión. Les hace un precio más barato por sacarlo por Buenos Aires que por Mar del Plata, pero después te suma el camión, los días de frío en la Terminal y terminás casi empatado, cuando sumás más riesgos. Y que no tenga ningún problema la carga, porque te mandan el tacho de vuelta sin importar nada. Mirá lo que pasó con el contenedor de Solimeno (se encontró droga cuando llegó a Europa en un cargamento el año pasado). Acá no hay riesgo ninguno. Hacés 20 cuadras y lo tenés en la plazoleta, esperando para subir al barco.
RP: Las empresas dicen que acá no hay contenedores secos, o los clientes les piden exportar por Buenos Aires.
EB: Mentiras, todas mentiras. Son excusas que ponen para no cargar por acá. No exportamos un solo contenedor de harina de pescado por el puerto. Consolidan dentro de la jurisdicción, entorpecen la operatoria y se llevan la carga por Buenos Aires. Supermercados Toledo mueve entre 300 y 400 contenedores por año, exporta e importa. Nunca lo hizo por acá porque las navieras le pasan el doble de flete. Lo mismo que a Matteria Hnos. Hizo inversiones en Dock Sud para sacar la producción por Buenos Aires. Ahora quiere comenzar a mover carga por Mar del Plata y pasa lo mismo. Ves el presupuesto que le pasan y no lo podés creer. Por eso, si no hay un acompañamiento de las autoridades es como nadar contra la corriente.
RP: Son las navieras y no el puerto las que siguen manejando la carga…
EB- Esa es la pelea cotidiana. Me peleo todos los días con los representantes de las navieras. Estamos presos de las navieras pero no se dan cuenta de que tienen cautivo un mercado que deben compartir. El día que lo tengan que compartir se van a pelar el culo (sic) para bajar las tarifas. Ahora se están peleando por la carga que pudimos mantener a partir del acuerdo que celebramos todos los prestadores de servicios con el Consorcio Portuario para que vengan a descargar los poteros.
RP: ¿Eso pasa ahora, la competencia entre MSC y Maersk ha permitido que las empresas paguen menos flete marítimo?
EB: La verdad que no. El precio de hace un año es muy similar al de hoy. Y eso que el costo para ellos bajó porque hubo una baja en el combustible. El otro día estaba leyendo un informe sobre la oferta de buques que hay en el mundo, pero acá no vienen. Y los que vienen solo priorizan la carga refrigerada, no les interesa subir carga seca ni fomentar la importación. Tenemos una industria textil importantísima, empresas de café, el sector metalmecánico. No les interesa nada más que lo refrigerado, y hasta ahí nomás. El sábado cargamos el buque de Maersk. Venía cargado de Rosario y no pudimos subir los 147 contenedores que teníamos enchufados. Quedaron 23 abajo. Ellos ya los querían mandar por camión a Buenos Aires. Por poco los tuvimos que amenazar con que si se iban por camión le cobrábamos al armador la tarifa sin promociones que acordamos por venir a descargar a Mar del Plata. Ahora viene el barco de nuevo este domingo, sube esos, más unos 30 de Fénix y otros que se sumaron en las últimas horas. Estaremos cerca de los 100.
RP: ¿Cómo pueden romper esa hegemonía?
EB: Poniendo un barco propio. Lo estamos pensando… Obviamente con el apoyo de las empresas. A Maersk y MSC sería a los primeros que invitaríamos a que suban carga porque apostaron por Mar del Plata. Pero podríamos cargar contenedores de otras navieras. Hemos estado en conversaciones con CMA; están interesados en operar en Mar del Plata. Hace un tiempo nos visitaron de Happang Lloyd. Si podemos llevar carga a Montevideo en un barco propio creo que los precios serían muy distintos para los exportadores e importadores y podríamos llevar todo, refrigerado y seco.
Roberto Garrone
Revista Puerto
Foto: Diego Izquierdo
