Errores no forzados, tiros en los pies y sin la grieta hay que ponerle el culo a la jeringa. La conducción política del intendente Guillermo Montenegro entró en un cono de sombras luego de las PASO. Compró adversarios en el PRO y en la UCR, aún siendo el único intendente que gozó del beneficio de ir con lista única. La reflexión “se cayó la marca JxC y el intendente mide más”, se podrá comprobar el cuarto domingo de octubre.
Este inquieto escenario impulsó el voluntarista “algo hay que hacer” La cuestión es tener algo para decir a partir del próximo viernes cuando termine este operativo.
Y se armó un modo timbreo (pero sin fotos) que ha trascendido y fue confirmado por varias fuentes consultadas. No esperan un resultado con rigor científico, con datos difíciles de procesar de acuerdo la metodología utilizada, la clásica división por cuadrículas de toda la ciudad, aunque también descartaron que se trate de un denominado trabajo de campo.
Casi un verdadero disloque de un clima pre anárquico, cuando lo que llueven son malas noticias y falta de precisiones
Las razones de inseguridad son un obstáculo que no facilita el acceso a quienes están renuentes a responder formularios políticos, lo cual reduce el resultado de la muestra.
El objetivo de ir casa por casa exime a los edificios, donde aproximadamente habita el 60 % de la población marplatense. Funcionarios y empleados de la municipalidad afines a los cuadros políticos, hablan con vecinos para saber qué opinión tienen de la gestión local y a quién van a votar el 22 de octubre
Lo hacen en modo encuestadora, pero en verdad lo armaron el diputado Maximiliano Abad, el Cenador de Palermo Soho (Alejandro Rabonivich), con la aprobación del intendente y bajo el control de Gustado Serebrinsky, apoyado en una especialista de su equipo.
Todo es militancia que pagan los vecinos, o sea “Con la nuestra”. El viernes empezaron los timbreos, les dieron licencia laboral para no concurrir con tal que salgan a hacer ese trabajo. No todos accedieron, por ejemplo no participan los alineados en la nómina de Emiliano Giri.
Muy preocupados
El gobierno aparece desconectado de la realidad o perciben que el timming con los vecinos y vecinas marplatenses no es el esperado. Ese dato, representa el 60 % de los ciudadanos que no se expresaron por Juntos Por el Cambio, los reacios se repartieron entre Unión por la Patria y La Libertad Avanza.
Las imágenes y devoluciones que vive Montenegro en público, son momentos inducidos en circunstancias favorables en sus encuentros con vecinos, en reuniones programadas o sus visitas a lugares gastronómicos, cafeterías, pizzerías que reflejan un amable intercambio, pero no es demasiado cómo para recibir una evaluación de gestión. Ni hablar en el círculo rojo, en la Catedral o en la tapa de multimedios, es una ceremonia, un ritual que no es medida.
Los comportamientos urbanos y los votos suelen no ir por el mismo andarivel. Además existe una protección mediática dispuesta a cubrir las acciones de gobierno. Ese dato forma parte del paquete del relato que el propio intendente utiliza como rebote de sus ocasionales ráfagas de intercambio con los marplatenses.
Nunca una queja, una protesta, un reclamo, ya lo había advertido el entonces no Cenador de Palermo Soho, para ser más precisos el 4 de enero de 2020 a las 16.00 en la Secretaría Privada: “Nosotros sólo vamos a dar buenas noticias”, “que Mar del Plata sea la ciudad del si”, o “En Mar del Plata tenemos todo”, ese es el menú a transmitir
Quizás esas máximas cumplidas en su máxima expresión, no hayan arrojado los beneficios esperados. Las consecuencias han brotado y no desaparecerán el 22 de octubre, sino que se ha instalado un escenario de tercios, la territorialidad y la boleta delivery, este será el ámbito de la compulsa.
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