La edil radical Vilma Baragiola, autora del proyecto de reconocimiento al embajador Manzo, evocando las raíces italianas en sus antepasados expresó:
“La ciudad tiene mucho de Italia. Sus inmigrantes vinieron con humildad y dignidad y prosperaron con el trabajo. Hay representación de todas las regiones y eso refleja la preponderancia de la colectividad. El futuro del vínculo entre ambas naciones está garantizado”.
El acto se desarrolló en el recinto de sesiones. Y estuvieron presentes además de Baragiola el Presidente del Concejo Deliberante, Guillermo Sáenz Saralegui (AA); los concejales Cristina Coria (UCR), Patricia Mabel Serventich y Marcelo Carrara (AA), Guillermo Volponi (monobloque); Alejandro Carrancio (CREAR Mar del Plata), Ariel Ciano (1PAÍS); el vicepresidente del EMTUR, Jorge Zanier, en representación del intendente Carlos Arroyo; otros funcionarios del Departamento Ejecutivo; varios representantes de la comunidad italiana residente en Mar del Plata, entre ellos, el cónsul Dario Cortese; el presidente del COMITES, Rafael Vitiello; el presidente de la Federación de Sociedades Italianas, Rubén Pili; los consultores de la Región Emilia Romagna, Alberto Becchi; la Región Puglia, Sergio Patruno; y Región Calabria, Olga La Rosa; el jefe de la Oficina Social y Coordinación Consular de la Embajada de Italia, Omar Appolloni; la directora del Instituto Italiano de Cultura de Buenos Aires, Donatella Cannova; referentes y presidentes de entidades regionales e invitados especiales.
Tras recibir la distinción, el embajador de Italia en Mar del Plata, Guiseppe Manzo, dejó de lado el rigor del protocolo y descartó la posibilidad de leer su discurso de agradecimiento. Fruto de su carisma y espontaneidad, dijo: “Bienvenidos a todos, muchas gracias por el reconocimiento. Les puedo asegurar que después de vivir este acto, no me sorprende la presencia fuerte de la colectividad italiana en La Feliz. A los chicos del colegio Da Vinci les agradezco la presencia y les auguro que son el futuro del puente que seguirá uniendo a nuestros dos países que, en cierto sentido, son uno solo. Me siento en una ciudad italiana. Y como dice el video de las Abuelas de Plaza de Mayo: la identidad no se impone; la identidad se vive. Hoy es una jornada de italianidad. Me siento honrado de representar a mi país en una ciudad que siento propia. Muchas gracias”.
En el final del acto, alumnos del colegio Leonardo Da Vinci interpretaron dos canciones tradicionales de la cultura italiana.