Ya el clásico fin de semana del 12 de octubre es historia, como referente de alquileres de temporada alta en Mar del Plata. Los fines de semana largo con corrimiento de feriados y días puente, que impulsó el actual gobierno fue variando esta conducta y ahora las reservas se hacen noviembre y hasta en diciembre, el 8 Día de la Inmaculada Concepción, y porque no en la extendida costumbre que se ha dado de pasar las tradicionales fiestas de fin de año junto al mar.
Esta modalidad ha provocado que ya en la última semana de noviembre, se registre el peor nivel de reservas de la última década, en lo que impacta también la elección de un nuevo presidente y la adopción de medidas propias de una corrección en la política económica. Además también se ha instalado la conducta de llegar y alquilar sobre la marcha y hasta en función del conocimiento previo de las características del clima, lo cual alienta o desalienta a los turistas dispuestos a disfrutar del principal atractivo, compuesto por el mar y las playas.
No debe olvidarse que anticipándose a las medidas cambiarias y económicas del actual gobierno nacional, hubo venta anticipada de paquetes turísticos de viajes al exterior concretadas con dólares subsidiados, estas operaciones se hicieron desde hace aproximadamente seis meses e impactaron fuertemente en la clase media y alta, que con poder adquisitivo dispusieron de la posibilidad que afecta directamente al turismo nacional.