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Dramis: “No teníamos que perder la paciencia”

Mariano Dramis vive de manera especial el campeonato obtenido por la Intermedia de Sporting tras vencer en el clásico final a Mar del Plata Club de visitante por 29-21, en un partido que estaba cuesta arriba. Este título podría ser el último para “Tormenta”, psiquiatra de 35 años y padre de Federica. El desgaste se siente y entonces analiza dejar de jugar, aunque lejos está de confirmarlo.

“Haber salido campeón es importante porque son los últimos cartuchos… hace rato que vengo diciendo que es el último (risas), ya me pasó en el Regional de Primera del 2017 cuando lo ganamos”, dijo el tercera línea. “Estuvo muy bueno, hacía mucho que la Intermedia no salía campeona, desde 2015. Teníamos una deuda. Además fue hermoso cómo se dio, porque le ganamos el clásico a Mara del Plata Club en su cancha y lo hicimos con claridad”, agregó.

– Ganaron bien, pero iban perdiendo 11-3.

– Sí, pero el resultado no era acorde a cómo se estaba dando el partido. Ellos atacaron alguna que otra vez, nos metieron dos penales y un try, pero nosotros teníamos más la pelota y estábamos dominando en el terreno, lo que nos pasaba era que no estábamos siendo eficaces. Corregimos eso y lo terminamos demostrando en el resultados.

– ¿Qué se dijeron cuando estaban perdiendo?

– Que no teníamos que perder la paciencia, cosa que nos había pasado en el partido anterior que habíamos perdido contra “Mardel”. Recordamos eso, que teníamos la pelota y estábamos atacando, que los puntos iban a llegar y así fue.

– ¿Cómo analizás la conformación del plantel?

– En los últimos años subieron muchos chicos con condiciones y que rápidamente se ensamblan al Plantel Superior, ya sea Pre, Intermedia o Primera. Antes costaba más llegar y ponerse a la par de los referentes. Creo que el laburo de abajo en el club es muy bueno, por eso suben siendo muy chicos y juegan cosas importantes haciendo buenos papeles. Tenemos mucha variedad en edad y los más grandes marcamos el camino. A veces a los chicos les cuesta más, pero creo que es algo generacional.

– ¿Por qué te cuesta dejar de jugar?

– Yo también me lo pregunto (risas). Pero no dejo por muchas cosas, por los sábados, los terceros tiempos, las juntadas, los partidos, los campeonatos. Me sigo divirtiendo y quiero seguir perteneciendo, aunque sé que en el algún momento tendré que dejar.

– Ahora que saliste campeón, ¿la opción de retirarte está más firme?

– No, el 2019 lo voy a terminar por supuesto, quedan cosas muy importantes por jugar. La decisión se debe tomar antes de la pretemporada, uno a mitad de año está cansado y golpeado y tiene ganas de dejar al año siguiente, por eso hay que decidir en enero, antes de arrancar. Es una decisión difícil.

– ¿Cómo ves el presente del club?

– Ni hablar que la gestión está buenísima y el club sigue creciendo a pasos agigantados. Lo de Rumencó, lo del Sintético, con la cantidad de jugadoras y jugadores que hay en Infantiles, con las chicas de la Primera de hockey que salieron campeonas después de tanto tiempo. Todo es espectacular. Que haya que buscar un Anexo porque no entramos en la Villa es espectacular.

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