Las incursiones de Joaquín De la Torre, subiendo la vara de su competencia para medirse con ministros de la talla de Marcos Peña y Nicolás Dujovne,¿tienen el guiño de la gobernadora María Eugenia Vidal? ¿Es propio de la impericia política de un evadido del massismo? ¿Está fuera de control? o ¿Tiene aspiraciones a futuro de convertirse en el ministro preferido de la mujer política, que tiene mayor medición de imagen positiva del país? Nada es casual, si tenemos en cuenta que ha comenzado a rodar con insistencia la chance de Vidal de suceder a Macri, ante un avance de su desgaste en la gestión.
Es que el ex intendente de San Miguel volvió a la carga. Lo llamativo es que Joaquín De la Torre lo haya hecho haciéndose eco de una frase que una versión periodística atribuye al Ministro de Hacienda. “Espero que esto que afirma @BonelliOK hoy (por ayer) en Clarín, sobre supuestos dichos de @NicoDujovne, no sea cierto. Sería oportuno que el Ministro lo aclare”, escribió en la red social, poniendo en un verdadero brete al superministro. De la Torre dejó también muy mal parado al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, artífice excluyente de la aprobación de la Ley de Presupuesto 2019, piedra basal de la continuidad de CAMBIEMOS en el poder nacional, provincial y Capital Federal.
Oportunamente cuando despuntaba el 2017, mdphoy.com , cuando pocos lo presumían adelantó el movimiento de un armado propio de un incipiente “vidalismo” en la provincia, una especie de Plan B, siempre tan vigente en los políticos que se preocupan para auto preservarse, cualquiera sea el derrotero de los acontecimientos. De la Torre salió a la caza en la provincia de denominados “sin tierra” para engordar el oficialismo.
La versión marplatense, encontró boyando a Lucas Fiorini, expulsado como un delincuente del Frente Renovador, a quien no le dieron ni la oportunidad de “tomarse el palo” como ocurre con la gran mayoría de los dirigentes de la ancha avenida del medio, que hacen cola para terminar de vaciar la fuerza política que se devoró a Sergio Massa.
Obvio, Fiorini hizo causa común con De la Torre y entró en la ciénaga dentro de CAMBIEMOS. El senador provincial Fiorini y Alejandro Carrancio (un invisible concejal de ese raro palo político) tienen un detalle que no debería ser pasado por alto. Ambos se presentan como los hombres de María Eugenia Vidal, siendo los pilares de la precandidatura a intendente de General Pueyrredon, del diputado nacional Guillermo Montenegro, un poco más conocido en Mar del Plata que el “Rolfi” Montenegro, el veterano volante que ya se retiró en Huracán de Parque de los Patricios.
Joaquín De la Torre bolilla negra entre ministros nacionales y provinciales